Génesis 31:31-35
La Palabra (Hispanoamérica)
31 Entonces Jacob respondió a Labán:
— Es que tuve miedo. Pensé que tal vez me ibas a arrebatar por la fuerza a tus hijas. 32 Eso sí, aquel en cuyo poder se encuentren tus dioses, que lo pague con su vida. Pongo a nuestros parientes como testigos: busca si hay algo tuyo, y llévatelo.
Pero Jacob no sabía que los había robado Raquel.
33 Labán entró en la tienda de Jacob, luego en la de Lía, y también en la de las dos criadas, pero no encontró nada. Cuando salió de la tienda de Lía pasó a la de Raquel. 34 Pero Raquel ya había tomado los ídolos, los había escondido debajo de la montura del camello y se había sentado encima de ellos. Mientras tanto Labán registró toda la tienda y no encontró nada. 35 Entonces Raquel le dijo a su padre:
— No tome a mal mi señor que no me levante ante ti; tengo la menstruación.
Y por más que buscó, Labán no logró encontrar los ídolos.
Read full chapterLa Palabra, (versión hispanoamericana) © 2010 Texto y Edición, Sociedad Bíblica de España