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y dijeron al profeta Jeremías: «Llegue[a] ahora ante ti nuestra súplica(A), y ruega al Señor tu Dios por nosotros(B), por todo este remanente, porque quedamos pocos de muchos que éramos(C), como pueden ver tus ojos, para que el Señor tu Dios nos indique el camino por donde debemos ir(D) y lo que debemos hacer».

Entonces el profeta Jeremías les dijo: «Los he oído. Voy a orar al Señor su Dios conforme a sus palabras(E), y todas las palabras que el Señor les responda, yo se las declararé(F). No les ocultaré palabra alguna(G)». Y ellos dijeron a Jeremías: «Que el Señor sea un testigo(H) veraz y fiel contra nosotros si no obramos conforme a toda palabra que el Señor tu Dios te mande para nosotros. Sea buena o mala, escucharemos la voz del Señor nuestro Dios(I) a quien te enviamos, para que nos vaya bien cuando escuchemos la voz del Señor nuestro Dios(J)».

Después de diez días, vino la palabra del Señor(K) a Jeremías.

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Footnotes

  1. 42:2 Lit. Caiga.