Jueces 10:6-16:31
Nueva Biblia de las Américas
Opresión amonita
6 Pero los israelitas volvieron a hacer lo malo ante los ojos del Señor. Sirvieron a los Baales, a Astarot(A), a los dioses de Aram, a los dioses de Sidón, a los dioses de Moab, a los dioses de los amonitas(B) y a los dioses de los filisteos. Abandonaron, pues, al Señor(C) y no le sirvieron. 7 Entonces se encendió la ira del Señor contra Israel, y los entregó en manos de los filisteos(D) y en manos de los amonitas. 8 Y ellos afligieron[a] y quebrantaron a los israelitas ese año. Y por dieciocho años oprimieron a todos los israelitas que estaban al otro lado del Jordán, en Galaad, en la tierra de los amorreos. 9 Los amonitas cruzaron el Jordán para pelear también contra Judá, contra Benjamín y contra la casa de Efraín, y se angustió Israel en gran manera.
10 Entonces los israelitas clamaron al Señor: «Hemos pecado contra Ti, porque ciertamente hemos abandonado a nuestro Dios y hemos servido a los Baales(E)». 11 Y el Señor respondió a los israelitas(F): «¿No los libré Yo de los egipcios, de los amorreos, de los amonitas(G) y de los filisteos? 12 Cuando los sidonios, los amalecitas y los maonitas[b] los oprimían(H), clamaron a Mí, y Yo los libré de sus manos. 13 Pero ustedes me han dejado(I) y han servido a otros dioses. Por tanto, no los libraré más. 14 Vayan y clamen a los dioses que han escogido; que ellos los libren en el tiempo de su aflicción(J)».
15 Los israelitas respondieron al Señor: «Hemos pecado, haz con nosotros como bien te parezca(K). Solo te rogamos que nos libres en este día». 16 Y quitaron los dioses extranjeros de en medio de ellos y sirvieron al Señor(L). Y Él no pudo soportar más[c] la angustia de Israel(M).
17 Entonces los amonitas se reunieron y acamparon en Galaad, y los israelitas se juntaron y acamparon en Mizpa(N). 18 Y el pueblo, los jefes de Galaad, se dijeron unos a otros: «¿Quién es el hombre que comenzará la batalla contra los amonitas? Él será caudillo de todos los habitantes de Galaad».
Jefté libra a Israel
11 Jefté el galaadita(O) era un guerrero valiente[d], hijo de una ramera. Galaad era el padre de[e] Jefté. 2 Y la mujer de Galaad le dio hijos. Y cuando los hijos de su mujer crecieron, echaron fuera a Jefté, y le dijeron: «No tendrás heredad en la casa de nuestro padre, porque eres hijo de otra mujer». 3 Jefté huyó de sus hermanos y habitó en la tierra de Tob(P). Y hombres indignos se juntaron con[f] Jefté y salían con él.
4 Después de cierto tiempo sucedió que los amonitas(Q) pelearon contra Israel. 5 Y cuando los amonitas pelearon contra Israel, los ancianos de Galaad fueron a traer a Jefté de la tierra de Tob. 6 Y dijeron a Jefté: «Ven y sé nuestro jefe para que peleemos contra los amonitas». 7 Entonces Jefté contestó a los ancianos de Galaad: «¿No me odiaron y me echaron de la casa de mi padre? ¿Por qué, pues, han venido a mí ahora cuando están en apuros(R)?».
8 Y los ancianos de Galaad dijeron a Jefté: «Por esta causa hemos vuelto a ti: para que vengas con nosotros y pelees contra los amonitas y seas jefe sobre todos los habitantes de Galaad(S)». 9 Jefté respondió a los ancianos de Galaad: «Si me hacen volver para pelear contra los amonitas y el Señor me[g] los entrega, ¿seré yo el jefe de ustedes?». 10 Y los ancianos de Galaad dijeron a Jefté: «El Señor es testigo[h] entre nosotros(T). Ciertamente haremos como has dicho[i]». 11 Entonces Jefté fue con los ancianos de Galaad, y el pueblo lo hizo cabeza y jefe sobre ellos. Y Jefté habló todas sus palabras delante del Señor en Mizpa(U).
12 Y envió Jefté mensajeros al rey de los amonitas para que le dijeran: «¿Qué hay entre usted y yo[j], que ha venido a mí para pelear contra mi tierra?». 13 El rey de los amonitas dijo a los mensajeros de Jefté: «Porque Israel tomó mi tierra, cuando subieron de Egipto, desde el Arnón hasta el Jaboc(V) y el Jordán; por tanto devuélvela ahora en paz».
14 Pero Jefté volvió a enviar mensajeros al rey de los amonitas, 15 que le dijeron: «Así dice Jefté: “Israel no tomó la tierra de Moab, ni la tierra de los amonitas.
16 ”Porque cuando subieron de Egipto, e Israel pasó por el desierto hasta el mar Rojo[k](W) y llegó a Cades(X), 17 entonces Israel envió mensajeros al rey de Edom diciéndole: ‘Permítanos, le rogamos, pasar por su tierra’, pero el rey de Edom no los escuchó. También enviaron mensajeros al rey de Moab pero él no consintió(Y), así que Israel permaneció en Cades. 18 Luego atravesaron el desierto y rodearon la tierra de Edom y de Moab(Z), llegaron al lado oriental de la tierra de Moab y acamparon al otro lado del Arnón; pero no entraron en el territorio de Moab(AA), porque el Arnón era la frontera de Moab.
19 ”(AB)Entonces Israel envió mensajeros a Sehón, rey de los amorreos, rey de Hesbón, y le dijo Israel: ‘Permítanos, le rogamos, pasar por su tierra a nuestro lugar’. 20 Pero Sehón no confió en Israel para darle paso por su territorio. Reunió, pues, Sehón a todo su pueblo y acampó en Jahaza, y peleó contra Israel. 21 El Señor, Dios de Israel, entregó a Sehón y a todo su pueblo en manos de Israel, y los derrotaron[l], e Israel tomó posesión de toda la tierra de los amorreos, los habitantes de esa región(AC).
22 ”Y poseyeron todo el territorio de los amorreos desde el Arnón hasta el Jaboc(AD), y desde el desierto hasta el Jordán. 23 Puesto que el Señor, Dios de Israel, expulsó[m] a los amorreos de delante de su pueblo Israel, ¿va usted a poseerla?
24 ”¿No posee usted lo que Quemos(AE), su dios, le ha dado para poseer? De modo que todo el territorio que el Señor nuestro Dios ha desposeído delante de nosotros, lo poseeremos. 25 Ahora pues, ¿es usted mejor que Balac, hijo de Zipor, rey de Moab(AF)? ¿Acaso luchó él con Israel, o acaso peleó contra ellos?
26 ”Mientras Israel habitaba en Hesbón y sus pueblos(AG), y en Aroer y sus aldeas, y en todas las ciudades que están a orillas del Arnón por 300 años, ¿por qué no las recuperó durante ese tiempo? 27 Por tanto, yo no he pecado contra usted, pero usted me está haciendo mal al hacer guerra contra mí. Que el Señor, el Juez, juzgue hoy entre los israelitas y los amonitas(AH)”». 28 Pero el rey de los amonitas no hizo caso al mensaje[n] que Jefté le envió.
Voto y victoria de Jefté
29 El Espíritu del Señor vino sobre Jefté(AI). Entonces Jefté pasó por Galaad y Manasés. Luego pasó por Mizpa de Galaad, y de Mizpa de Galaad fue adonde estaban los amonitas. 30 Y Jefté hizo un voto al Señor, y dijo: «Si en verdad entregas en mis manos a los amonitas, 31 sucederá que cualquiera que salga de las puertas de mi casa a recibirme cuando yo vuelva en paz de los amonitas, será del Señor, o[o] lo ofreceré como holocausto».
32 Jefté cruzó adonde estaban los amonitas para pelear contra ellos, y el Señor los entregó en su mano. 33 Y los hirió con una gran matanza desde Aroer hasta la entrada de Minit(AJ), veinte ciudades, hasta Abel Keramim. Y los amonitas fueron sometidos delante de los israelitas.
34 Cuando Jefté llegó a su casa en Mizpa(AK), su hija salió a recibirlo con panderos y con danzas(AL). Ella era su única hija. Fuera de ella no tenía hijo ni hija.
35 Al verla, él rasgó sus ropas y dijo: «¡Ay, hija mía! Me has abatido y estás entre los que me afligen. Porque he dado mi palabra[p] al Señor, y no me puedo retractar(AM)». 36 Entonces ella le dijo: «Padre mío, has dado tu palabra[q] al Señor. Haz conmigo conforme a lo que has dicho[r](AN), ya que el Señor te ha vengado de tus enemigos, los amonitas».
37 Y ella dijo a su padre: «Que se haga esto por mí; déjame sola por dos meses, para que vaya yo a[s] los montes y llore por mi virginidad(AO), yo y mis compañeras». 38 Y él dijo: «Ve», y la dejó ir por dos meses; y ella se fue con sus compañeras, y lloró su virginidad por los montes.
39 Al[t] cabo de los dos meses ella regresó a su padre, que cumplió con ella conforme al voto que había hecho; y ella no tuvo relaciones con ningún hombre[u]. Y se hizo costumbre en Israel, 40 que de año en año las hijas de Israel fueran cuatro días en el año a conmemorar[v] a la hija de Jefté el galaadita.
Muerte de Jefté
12 Los hombres de Efraín se reunieron y cruzaron el Jordán hacia el norte[w], y dijeron a Jefté: «¿Por qué cruzaste a pelear contra los amonitas sin llamarnos para que fuéramos contigo(AP)? Quemaremos tu casa sobre ti». 2 Y Jefté les respondió: «Yo y mi pueblo estábamos en gran lucha con los amonitas, y cuando los llamé a ustedes, no me libraron de sus manos. 3 Viendo, pues, que no me iban a librar, arriesgué mi vida[x](AQ) y crucé contra los amonitas, y el Señor los entregó en mi mano. ¿Por qué, pues, han subido hoy a pelear contra mí?».
4 Entonces Jefté reunió a todos los hombres de Galaad y peleó contra Efraín. Los hombres de Galaad derrotaron[y] a Efraín, porque estos decían: «Son fugitivos de Efraín, ustedes los galaaditas, en medio de Efraín y en medio de Manasés».
5 Y se apoderaron los galaaditas de los vados del Jordán(AR) al lado opuesto de Efraín. Cuando alguno de los fugitivos de Efraín decía: «Déjenme cruzar», los hombres de Galaad le decían: «¿Eres efrateo?». Si él respondía: «No», 6 entonces, le decían: «Di, pues, la palabra Shibolet». Pero él decía: «Sibolet», porque no podía pronunciarla correctamente[z]. Entonces le echaban mano y lo mataban junto a los vados del Jordán. Y cayeron en aquella ocasión 42,000 de los de Efraín. 7 Jefté juzgó a Israel seis años. Y murió Jefté el galaadita, y fue sepultado en una de las ciudades de Galaad.
Ibzán, Elón y Abdón, jueces de Israel
8 Después de Jefté[aa] juzgó a Israel Ibzán de Belén. 9 Y tuvo treinta hijos y treinta hijas, a estas las casó[ab] fuera de la familia, y trajo de afuera treinta hijas para sus hijos. Él juzgó a Israel siete años. 10 Murió Ibzán, y fue sepultado en Belén.
11 Después de Ibzán, juzgó a Israel Elón el zabulonita; quien juzgó a Israel diez años. 12 Murió Elón el zabulonita, y fue sepultado en Ajalón, en la tierra de Zabulón.
13 Entonces Abdón, hijo de Hilel el piratonita, juzgó a Israel después de Elón[ac]. 14 Tuvo cuarenta hijos y treinta nietos que cabalgaban en setenta asnos. Él juzgó a Israel ocho años. 15 Y murió Abdón, hijo de Hilel el piratonita, y fue sepultado en Piratón, en la tierra de Efraín, en la región montañosa de los amalecitas.
Opresión filistea
13 Los israelitas volvieron a hacer lo malo ante los ojos del Señor(AS), y el Señor los entregó en manos de los filisteos durante cuarenta años.
2 Había un hombre de Zora(AT), de la familia de los danitas, el cual se llamaba Manoa; su mujer era estéril y no había tenido hijos. 3 Entonces el ángel del Señor se le apareció a la mujer(AU), y le dijo: «Tú eres estéril y no has tenido hijos, pero vas a concebir y a dar a luz un hijo. 4 Ahora pues, cuídate de no beber vino ni licor(AV), y de no comer ninguna cosa inmunda. 5 Porque vas a concebir y a dar a luz un hijo. Él no pasará navaja sobre su cabeza, porque el niño será nazareo para Dios(AW) desde el seno materno(AX). Y él comenzará a salvar a Israel(AY) de manos de los filisteos».
6 La mujer fue y se lo dijo a su marido: «Un hombre de Dios vino a mí(AZ), y su aspecto era como el aspecto del ángel de Dios, muy imponente. Yo no le pregunté de dónde venía, ni él me hizo saber su nombre. 7 Pero él me dijo: “Vas a concebir y a dar a luz un hijo; desde ahora no beberás vino ni licor, ni comerás cosa inmunda, porque el niño será nazareo para Dios desde el seno materno hasta el día de su muerte”».
8 Entonces Manoa imploró al Señor, y dijo: «Te ruego Señor, que el hombre de Dios que Tú enviaste venga otra vez a nosotros, para que nos enseñe lo que hemos de hacer con el niño que ha de nacer(BA)». 9 Dios escuchó la voz de Manoa. Y el ángel de Dios vino otra vez a la mujer(BB) cuando estaba sentada en el campo; pero Manoa su marido no estaba con ella.
10 La mujer corrió rápidamente y avisó a su marido, y le dijo: «Ven, se me ha aparecido el hombre que vino[ad] el otro día(BC)». 11 Manoa se levantó y siguió a su mujer, y cuando llegó al hombre, le dijo: «¿Eres el hombre que habló a la mujer(BD)?». «Yo soy», respondió él.
12 Y Manoa le preguntó: «Cuando tus palabras se cumplan, ¿cómo debe ser el modo de vivir del muchacho y cuál su vocación?». 13 Y el ángel del Señor contestó a Manoa: «Que la mujer atienda a[ae] todo lo que le dije(BE). 14 No comerá nada que venga de la vid(BF), no beberá vino ni licor, ni comerá nada inmundo(BG). Ella deberá guardar todo lo que le he ordenado».
Nacimiento de Sansón
15 Entonces Manoa dijo al ángel del Señor(BH): «Permítenos detenerte y prepararte un cabrito». 16 Y el ángel del Señor respondió a Manoa: «Aunque me detengas, no comeré de tu alimento[af](BI), pero si preparas un holocausto, ofrécelo al Señor». Y[ag] Manoa no sabía que era el ángel del Señor.
17 Y Manoa dijo al ángel del Señor: «¿Cuál es tu nombre(BJ), para que cuando se cumplan tus palabras, te honremos?». 18 El ángel del Señor le respondió: «¿Por qué preguntas mi nombre, viendo que es maravilloso[ah](BK)?».
19 Entonces Manoa tomó el cabrito con la ofrenda de cereal y los ofreció sobre una piedra al Señor(BL), y el ángel hizo maravillas mientras que Manoa y su mujer observaban. 20 Pues sucedió que cuando la llama subía del altar hacia el cielo, el ángel del Señor ascendió en la llama del altar. Al ver esto, Manoa y su mujer cayeron rostro en tierra(BM).
21 El ángel del Señor no se volvió a aparecer a Manoa ni a su mujer. Entonces Manoa supo que era el ángel del Señor(BN). 22 Y Manoa dijo a su mujer: «Ciertamente moriremos, porque hemos visto a Dios(BO)». 23 Pero su mujer le contestó: «Si el Señor hubiera deseado matarnos, no habría aceptado el holocausto ni la ofrenda de cereal de nuestras manos; tampoco nos habría mostrado todas estas cosas, ni nos habría permitido ahora oír cosas como estas(BP)».
24 Y la mujer dio a luz un hijo y le puso por nombre Sansón. El niño creció y el Señor lo bendijo(BQ). 25 Y el Espíritu del Señor(BR) comenzó a manifestarse en él en Majané Dan[ai], entre Zora y Estaol(BS).
El matrimonio de Sansón
14 Sansón descendió a Timnat y vio allí[aj] a una mujer de las hijas de los filisteos. 2 Cuando regresó[ak], se lo contó a su padre y a su madre: «Vi en Timnat a una mujer de las hijas de los filisteos. Ahora pues, tómenmela por mujer». 3 Le respondieron[al] su padre y su madre: «¿No hay mujer entre las hijas de tus parientes[am] o entre todo nuestro[an] pueblo, para que vayas a tomar mujer de los filisteos incircuncisos(BT)?». Pero Sansón dijo a su padre: «Tómala para mí, porque ella me agrada[ao]». 4 Su padre y su madre no sabían que esto era del Señor, porque Él buscaba ocasión contra los filisteos(BU), pues en aquel tiempo los filisteos dominaban a Israel.
5 Entonces Sansón descendió a Timnat con su padre y con su madre, y llegó hasta los viñedos de Timnat. Y allí un león joven venía rugiendo hacia él. 6 Pero el Espíritu del Señor vino[ap] sobre él(BV) con gran poder, y lo despedazó como se despedaza un cabrito, aunque no tenía nada en su mano(BW). Pero no contó a su padre ni a su madre lo que había hecho. 7 Descendió y habló con la mujer; y ella le agradó a Sansón[aq].
8 Cuando regresó más tarde para tomarla, se apartó del camino para ver el cadáver del león. Y había un enjambre de abejas y miel en el cuerpo del león. 9 Recogió la miel[ar] en sus manos[as] y siguió adelante, comiéndola mientras caminaba. Cuando llegó adonde estaban su padre y su madre, les dio miel y ellos comieron. Pero no les contó que había recogido la miel del cuerpo del león.
La adivinanza de Sansón
10 Después el padre descendió adonde estaba la mujer. Y Sansón hizo allí un banquete, porque así acostumbraban hacer los jóvenes. 11 Y cuando lo vieron, trajeron a treinta compañeros para que estuvieran con él.
12 Entonces Sansón les dijo: «Permítanme proponerles ahora una adivinanza(BX). Y si en verdad me la declaran dentro de los siete días del banquete, y la descifran, entonces les daré treinta vestidos de lino y treinta mudas de ropa(BY). 13 Pero si no pueden declarármela, entonces ustedes me darán treinta vestidos de lino y treinta mudas de ropa». «Dinos tu adivinanza, para que la escuchemos», le dijeron ellos. 14 Entonces les dijo:
«Del que come salió comida,
Y del fuerte salió dulzura».
Y no pudieron declararle la adivinanza en tres días.
15 Al cuarto[at] día dijeron a la mujer de Sansón: «Persuade a tu marido(BZ) a que nos declare la adivinanza, o te quemaremos a fuego a ti y a la casa de tu padre(CA). Nos han invitado para empobrecernos. ¿No es así?». 16 La mujer de Sansón lloró delante de él, y dijo: «Solo me aborreces y no me quieres. Has propuesto una adivinanza a los hijos de mi pueblo, y no me la has declarado(CB)». Y él le dijo: «No se la he declarado ni a mi padre ni a mi madre. ¿Y te la he de declarar a ti?». 17 Pero ella lloró delante de él los siete días que duró su banquete. Y sucedió el séptimo día que él se la declaró porque ella le presionaba mucho. Entonces ella declaró la adivinanza a los hijos de su pueblo.
18 Y al séptimo día, antes de ponerse el sol, los hombres de la ciudad le dijeron:
«¿Qué es más dulce que la miel?
¿Y qué es más fuerte que un león?».
Y Sansón les contestó:
«Si no hubieran arado con mi novilla,
No habrían descubierto mi adivinanza».
19 Entonces el Espíritu del Señor vino[au] sobre él(CC) con gran poder, y descendió a Ascalón y mató a treinta de ellos y tomando sus despojos, dio las mudas de ropa a los que habían declarado la adivinanza. Y ardiendo en ira, subió a la casa de su padre. 20 Pero la mujer de Sansón fue dada al compañero que había sido su amigo íntimo(CD).
Las zorras incendiarias
15 Después de algún tiempo, en los días de la siega del trigo, sucedió que Sansón fue a visitar a su mujer con un cabrito(CE), y dijo: «Llegaré a mi mujer en su recámara». Pero el padre de ella no lo dejó entrar. 2 Y el padre[av] dijo: «Realmente pensé que la odiabas intensamente y se la di a tu compañero(CF). ¿No es su hermana menor más hermosa[aw] que ella? Te ruego que la tomes en su lugar».
3 Entonces Sansón le[ax] respondió: «Esta vez no tendré culpa en cuanto a los filisteos cuando les haga daño». 4 Y Sansón fue y capturó 300 zorras, tomó antorchas, juntó las zorras cola con cola y puso una antorcha en medio de cada dos colas. 5 Después de prender fuego a las antorchas, soltó las zorras[ay] en los sembrados de los filisteos, quemando la cosecha recogida, la cosecha en pie, y además las viñas y los olivares.
6 Entonces los filisteos dijeron: «¿Quién hizo esto?». Y les respondieron: «Sansón, el yerno del Timnateo, porque este tomó a su mujer y se la dio a su compañero». Y los filisteos vinieron y la quemaron a ella y a su padre(CG). 7 Y Sansón les dijo: «Ya que actúan así, ciertamente me vengaré de ustedes, y después de eso, cesaré[az]». 8 Sin piedad los hirió[ba] con gran mortandad. Y descendió y habitó en la hendidura de la peña de Etam.
La quijada de asno
9 Entonces los filisteos subieron y acamparon en Judá, y se esparcieron por Lehi. 10 Y los hombres de Judá dijeron: «¿Por qué han subido contra nosotros?». Y ellos dijeron: «Hemos subido para prender a Sansón a fin de hacerle como él nos ha hecho». 11 De Judá descendieron 3,000 hombres a la hendidura de la peña de Etam, y dijeron a Sansón: «¿No sabes que los filisteos reinan sobre nosotros(CH)? ¿Qué, pues, es esto que nos has hecho?». «Como ellos me hicieron, así les he hecho», contestó él.
12 Y ellos le dijeron: «Hemos descendido para prenderte y entregarte en manos de los filisteos». «Júrenme que no me matarán[bb]», les dijo Sansón. 13 Ellos le respondieron[bc]: «No, sino que te ataremos bien y te entregaremos en sus manos. Ciertamente no te mataremos». Entonces lo ataron con dos sogas nuevas y lo sacaron de la peña.
14 Al llegar él a Lehi, los filisteos salieron a su encuentro gritando. Y el Espíritu del Señor vino[bd] sobre él(CI) con poder, y las sogas que estaban en sus brazos fueron como lino quemado con fuego y las ataduras cayeron[be] de sus manos. 15 Y halló una quijada de asno fresca aún, y extendiendo su mano, la tomó y mató[bf] a 1,000 hombres con ella(CJ).
16 Entonces Sansón dijo:
«Con la quijada de un asno,
Montones sobre montones[bg],
Con la quijada de un asno
He matado[bh] a 1,000 hombres».
17 Al terminar de hablar, arrojó la quijada de su mano, y llamó a aquel lugar Ramat Lehi[bi].
18 Después sintió una gran sed, y clamando al Señor(CK), dijo: «Tú has dado esta gran liberación por mano de Tu siervo, y ahora, ¿moriré yo[bj] de sed y[bk] caeré en manos de los incircuncisos?». 19 Y abrió Dios la cuenca que está en Lehi y salió agua de ella. Cuando bebió, recobró sus fuerzas[bl] y se reanimó(CL). Por eso llamó a aquel lugar[bm] En Hacore[bn], el cual está en Lehi hasta el día de hoy.
20 Sansón juzgó a Israel veinte años(CM) en los días de los filisteos(CN).
Sansón y Dalila
16 Sansón fue a Gaza(CO), y allí vio a una ramera y se llegó a ella. 2 Entonces fue dicho a los de Gaza: «Sansón ha venido acá». Y ellos cercaron el lugar y se apostaron a la puerta de la ciudad toda la noche, acechándolo(CP). Y estuvieron callados toda la noche y dijeron: «Esperemos hasta que amanezca[bo], entonces lo mataremos». 3 Pero Sansón permaneció acostado hasta la medianoche, y a la medianoche se levantó, y tomando las puertas de la ciudad con los dos postes, las arrancó junto con las trancas. Entonces se las echó sobre los hombros y las llevó hasta la cumbre del monte que está frente a Hebrón.
4 Después de esto, Sansón se enamoró de una mujer del[bp] valle de Sorec, que se llamaba Dalila. 5 Los príncipes de los filisteos(CQ) fueron a ella y le dijeron: «Persuádelo(CR), y ve dónde está su gran fuerza, y cómo[bq] podríamos dominarlo para atarlo y castigarlo[br]. Entonces cada uno de nosotros te dará 1,100 monedas de plata». 6 Dalila le dijo a Sansón: «Te ruego que me declares dónde está tu gran fuerza y cómo se te puede atar para castigarte[bs]». 7 Sansón le respondió: «Si me atan con siete cuerdas frescas que no se hayan secado, me debilitaré y seré como cualquier otro hombre».
8 Los príncipes de los filisteos le llevaron siete cuerdas frescas que no se habían secado, y Dalila lo ató con ellas. 9 Y ella tenía hombres al acecho en un aposento interior. Entonces le dijo: «¡Sansón, los filisteos se te echan encima[bt]!». Pero él rompió las cuerdas como se rompe un hilo de estopa cuando toca[bu] el fuego. Así que no se descubrió el secreto de su fuerza.
10 Entonces Dalila dijo a Sansón: «Mira, me has engañado y me has dicho mentiras. Ahora pues, te ruego que me declares cómo se te puede atar». 11 «Si me atan fuertemente con sogas nuevas que no se hayan usado[bv]», le respondió él, «me debilitaré y seré como cualquier otro hombre». 12 Dalila tomó sogas nuevas, lo ató con ellas, y le dijo: «¡Sansón, los filisteos se te echan encima[bw]!». Pues los hombres estaban al acecho en el aposento interior. Pero él rompió las sogas[bx] de sus brazos como un hilo.
13 Dalila entonces dijo a Sansón: «Hasta ahora me has engañado y me has dicho mentiras. Declárame, ¿cómo se te puede atar?». «Si tejes siete trenzas de mi cabellera[by] con la tela [bz]y la aseguras con una clavija», le dijo él, «entonces me debilitaré y seré como cualquier otro hombre». 14 Y mientras él dormía, Dalila tomó las siete trenzas de su cabellera[ca] y las tejió con la tela. Entonces la aseguró con la clavija, y le dijo: «¡Sansón, los filisteos se te echan encima[cb]!». Pero él despertó de su sueño y arrancó la clavija del telar y la tela.
15 Así que ella le dijo: «¿Cómo puedes decir: “Te quiero”, cuando tu corazón no está conmigo(CS)? Me has engañado estas tres veces y no me has declarado dónde reside tu gran fuerza». 16 Y[cc] como ella le presionaba diariamente con sus palabras y le apremiaba, su alma se angustió hasta[cd] la muerte.
17 Él le reveló[ce], pues, todo lo que había en su corazón, diciéndole: «Nunca ha pasado navaja sobre mi cabeza, pues he sido nazareo para Dios desde el vientre de mi madre(CT). Si me cortan el cabello[cf], mi fuerza me dejará y me debilitaré y seré como cualquier otro hombre».
18 Viendo Dalila que él le había declarado todo lo que había en su corazón, mandó llamar a los príncipes de los filisteos y dijo: «Vengan una vez más, porque él me ha declarado todo lo que hay en su corazón». Entonces los príncipes de los filisteos vinieron a ella y trajeron el dinero en sus manos. 19 Y ella lo hizo dormir sobre sus rodillas, y mandó llamar a un hombre que le rasuró las siete trenzas de su cabellera[cg]. Luego ella comenzó a afligirlo y su fuerza lo dejó.
20 Ella entonces dijo: «¡Sansón, los filisteos se te echan encima[ch]!». Y él despertó de su sueño, y dijo: «Saldré como las otras veces y escaparé[ci]». Pero no sabía que el Señor se había apartado de él(CU). 21 Los filisteos lo prendieron y le sacaron los ojos. Y llevándolo a Gaza, lo ataron con cadenas de bronce y lo pusieron a girar el molino[cj] en la prisión. 22 Pero el cabello de su cabeza comenzó a crecer de nuevo después de rasurado.
23 Los príncipes de los filisteos se reunieron para ofrecer un gran sacrificio a su dios Dagón(CV), y para regocijarse, pues decían:
«Nuestro dios ha entregado a nuestro enemigo Sansón en nuestras manos».
24 Cuando la gente lo vio, alabaron a su dios(CW), pues decían:
«Nuestro dios ha entregado en nuestras manos a nuestro enemigo(CX),
Al que asolaba nuestra tierra,
Y multiplicaba nuestros muertos».
25 Y cuando estaban bien alegres[ck], dijeron: «Llamen a Sansón para que nos divierta». Llamaron, pues, a Sansón de la cárcel, y él los divertía[cl]. Y lo pusieron de pie entre las columnas. 26 Entonces Sansón dijo al muchacho que lo tenía de la mano: «Déjame tocar las columnas sobre las que el edificio[cm] descansa, para apoyarme en ellas». 27 El edificio estaba lleno de hombres y mujeres, y todos los príncipes de los filisteos estaban allí. Y sobre la azotea había como 3,000 hombres y mujeres mirando mientras Sansón los divertía.
28 Entonces Sansón invocó al Señor(CY) y dijo: «Señor Dios[cn], te ruego que te acuerdes de mí, y te suplico que me des fuerzas solo esta vez, oh Dios, para vengarme ahora de los filisteos por mis dos ojos(CZ)». 29 Sansón palpó las dos columnas del medio sobre las que el edificio descansaba y se apoyó contra ellas, con su mano derecha sobre una y con su mano izquierda sobre la otra.
30 Y dijo Sansón: «¡Muera yo con los filisteos!». Y se inclinó con todas sus fuerzas y el edificio se derrumbó sobre los príncipes y sobre todo el pueblo que estaba en él. Así que los[co] que mató al morir fueron más que los que había matado durante su vida.
31 Entonces descendieron sus hermanos y toda la casa de su padre, y tomándolo, lo llevaron y lo sepultaron entre Zora y Estaol en la tumba de Manoa, su padre. Sansón había juzgado a Israel veinte años(DA).
Footnotes
- 10:8 Lit. destrozaron.
- 10:12 Algunos mss. de la versión gr. (sept.) dicen: madianitas.
- 10:16 Lit. y su alma se acortó por.
- 11:1 O poderoso hombre de valor.
- 11:1 Lit. engendró a.
- 11:3 Lit. a.
- 11:9 Lit. delante de mí.
- 11:10 Lit. oyente.
- 11:10 Lit. conforme a tu palabra.
- 11:12 Lit. Qué a mí y a ti.
- 11:16 Lit. mar de Cañas.
- 11:21 Lit. hirieron.
- 11:23 Lit. desposeyó.
- 11:28 Lit. no escuchó las palabras.
- 11:31 O y.
- 11:35 Lit. he abierto mi boca.
- 11:36 Lit. has abierto tu boca.
- 11:36 Lit. a lo que ha salido de tu boca.
- 11:37 Lit. vaya y descienda sobre.
- 11:39 Lit. Y fue que al.
- 11:39 Lit. no conoció hombre.
- 11:40 Lit. recontar; algunas versiones antiguas dicen: lamentar.
- 12:1 O hacia Zafón.
- 12:3 Lit. puse mi alma en mi palma.
- 12:4 Lit. hirieron.
- 12:6 Lit. hablar así.
- 12:8 Lit. él.
- 12:9 Lit. envió.
- 12:13 Lit. él.
- 13:10 Lit. vino a mí.
- 13:13 Lit. se guarde de.
- 13:16 Lit. pan.
- 13:16 Lit. Porque.
- 13:18 O incomprensible.
- 13:25 I.e. el campamento de Dan.
- 14:1 Lit. en Timnat.
- 14:2 Lit. subió.
- 14:3 Lit. Le dijo.
- 14:3 Lit. hermanos.
- 14:3 Lit. mi.
- 14:3 Lit. es perfecta en mis ojos.
- 14:6 Lit. cayó.
- 14:7 Lit. era perfecta en los ojos de Sansón.
- 14:9 Lit. Y la recogió.
- 14:9 Lit. palmas.
- 14:15 Así en algunas versiones antiguas; en heb. séptimo.
- 14:19 Lit. cayó.
- 15:2 Lit. el padre de ella.
- 15:2 Lit. mejor.
- 15:3 Lit. les.
- 15:5 Lit. las soltó.
- 15:7 I.e. de tomar venganza.
- 15:8 Lit. Y les hirió la pierna sobre el muslo.
- 15:12 Lit. caerán sobre mí.
- 15:13 Lit. le dijeron.
- 15:14 Lit. cayó.
- 15:14 Lit. se derritieron.
- 15:15 Lit. e hirió.
- 15:16 Lit. un montón, dos montones.
- 15:16 Lit. herido.
- 15:17 I.e. Alto de la Quijada.
- 15:18 O y ahora, yo moriré.
- 15:18 U o.
- 15:19 Lit. su espíritu.
- 15:19 Lit. lo llamó.
- 15:19 I.e. Manantial del que Clamó.
- 16:2 Lit. la luz de la mañana.
- 16:4 Lit. en el.
- 16:5 Lit. con qué.
- 16:5 Lit. afligirlo.
- 16:6 Lit. afligirte.
- 16:9 Lit. están sobre ti.
- 16:9 Lit. huele.
- 16:11 Lit. con las que no se ha hecho trabajo.
- 16:12 Lit. están sobre ti.
- 16:12 Lit. las rompió.
- 16:13 Lit. cabeza.
- 16:13 Las palabras: y la aseguras…con la tela (vers. 14), están en la sept., pero no en ningún ms. Heb.
- 16:14 Lit. cabeza.
- 16:14 Lit. están sobre ti.
- 16:16 Lit. Y fue que.
- 16:16 Lit. impacientó hasta el punto de.
- 16:17 O descubrió.
- 16:17 Lit. fuera rapado.
- 16:19 Lit. cabeza.
- 16:20 Lit. están sobre ti.
- 16:20 Lit. me soltaré.
- 16:21 Lit. fue molinero.
- 16:25 Lit. el corazón de ellos estaba alegre.
- 16:25 Lit. era objeto de burla.
- 16:26 Lit. la casa, y así en el resto del cap.
- 16:28 Heb. YHWH, generalmente traducido Señor.
- 16:30 Lit. los muertos.
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