Add parallel Print Page Options

entonces el sacerdote mandará tomar dos avecillas vivas y limpias, madera de cedro, un cordón escarlata e hisopo para el que ha de ser purificado(A). Después el sacerdote mandará degollar una de las avecillas en una vasija de barro sobre agua corriente. En cuanto a la avecilla viva, la tomará junto con la madera de cedro(B), el cordón escarlata y el hisopo(C), y los mojará junto con la avecilla viva en la sangre del ave muerta sobre el agua corriente.

Read full chapter