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47 Los levitas no fueron censados junto con los demás 48 porque el SEÑOR le dijo a Moisés: 49 «No hagas un censo de la tribu de Leví, ni los coloques en la lista con los demás israelitas. 50 Pon a los levitas a cargo de la Carpa Sagrada del Testimonio, sus accesorios y todo lo demás que tenga que ver con ella. Ellos serán quienes transporten la Carpa Sagrada y todos sus accesorios; la cuidarán y acamparán alrededor de ella. 51 Cuando haya que trasladar la Carpa Sagrada, los levitas serán quienes la desarmen y cuando haya que instalarla, ellos serán quienes la armen de nuevo. Todo el que sea ajeno a la carpa y se acerque a ella, será condenado a muerte. 52 Los demás israelitas acamparán por tropas, cada uno en su propio campamento y con su propia unidad militar. 53 Pero los levitas acamparán alrededor de la Carpa Sagrada del Testimonio para que así la ira de Dios no caiga sobre los israelitas. Los levitas estarán encargados de cuidar la Carpa Sagrada del Testimonio».

54 Los israelitas hicieron todo tal como el SEÑOR le ordenó a Moisés.

El SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: «Los israelitas deben acampar alrededor de la carpa del encuentro, a cierta distancia de ella, cada uno con su propia unidad militar y bajo los distintivos de su familia.

»Al oriente, por donde sale el sol, acamparán por tropas los de la unidad militar del campamento de Judá. Su jefe es Naasón hijo de Aminadab. Según el censo, sus tropas tienen 74 600 hombres.

»Acampando junto a ellos estará la tribu de Isacar. Su jefe es Natanael hijo de Zuar. Según el censo, sus tropas tienen 54 400 hombres.

»Junto a ellos acampará también la tribu de Zabulón. Su jefe es Eliab hijo de Helón. Según el censo, sus tropas tienen 57 400 hombres.

»Entonces, el total de las tropas del ejército de Judá es de 186 400 hombres, los cuales marcharán al frente.

10 »Al sur acamparán por tropas los de la unidad militar del campamento de Rubén. Su jefe es Elisur hijo de Sedeúr. 11 Según el censo, sus tropas tienen 46 500 hombres.

12 »Acampando junto a ellos estará la tribu de Simeón. Su jefe es Selumiel hijo de Zurisaday. 13 Según el censo, sus tropas tienen 59 300 hombres.

14 »Junto a ellos acampará también la tribu de Gad. Su jefe es Eliasaf hijo de Deuel. 15 Según el censo, sus tropas tienen 45 650 hombres.

16 »Entonces, el total de las tropas del ejército de Rubén es de 151 450 hombres, los cuales marcharán en segundo lugar.

17 »En seguida, en medio de los demás ejércitos, marchará la carpa del encuentro, el ejército de los levitas. Todos ellos marcharán en el mismo orden que acamparon, en la misma posición, conforme a sus unidades militares.

18 »En el lado occidental acamparán por tropas los de la unidad militar del campamento de Efraín. Su jefe es Elisama hijo de Amiud. 19 Según el censo, sus tropas tienen 40 500 hombres.

20 »Acampando junto a ellos estará la tribu de Manasés. Su jefe es Gamaliel hijo de Pedasur. 21 Según el censo, sus tropas tienen 32 200 hombres.

22 »Junto a ellos acampará también la tribu de Benjamín. Su jefe es Abidán hijo de Gedeoni. 23 Según el censo, sus tropas tienen 35 400 hombres.

24 »Entonces, el total de las tropas del ejército de Efraín es de 108 100 hombres. Ellos marcharán de terceros.

25 »En el lado norte acamparán por tropas los de la unidad militar del campamento de Dan. Su jefe es Ajiezer hijo de Amisadai. 26 Según el censo, sus tropas tienen 62 700 hombres.

27 »Acampando junto a ellos estará la tribu de Aser. Su jefe es Paguiel hijo de Ocrán. 28 Según el censo, sus tropas tienen 41 500 hombres.

29 »Junto a ellos acampará también la tribu de Neftalí. Su jefe es Ajirá hijo de Enán. 30 Según el censo, sus tropas tienen 53 400 hombres.

31 »Entonces, el total de las tropas del ejército de Dan es de 157 600 hombres. Ellos marcharán en la retaguardia, conforme a sus unidades militares».

32 El censo de las familias israelitas dio un gran total de 603 550 hombres. 33 Pero tal como el SEÑOR ordenó a Moisés, las familias de los levitas no participaron en el censo.

34 Así que los israelitas hicieron todo tal como el SEÑOR mandó a Moisés: acamparon por unidades militares, y cada uno marchó con su propio grupo familiar y su propia familia.

La familia de Aarón, los sacerdotes

Así estaba conformada la familia de Aarón y de Moisés en el tiempo que el SEÑOR habló con Moisés en el monte Sinaí. Los hijos de Aarón eran Nadab, el mayor, seguido de Abiú, Eleazar e Itamar. Esos eran los hijos de Aarón, quienes fueron consagrados con aceite como sacerdotes, pero Nadab y Abiú murieron delante del SEÑOR en el desierto de Sinaí mientras servían al SEÑOR porque le ofrecieron una clase de fuego que él no había ordenado. Puesto que Nadab y Abiú no tuvieron hijos, sólo Eleazar e Itamar sirvieron como sacerdotes en vida de Aarón, su papá.

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Trae a los de la tribu de Leví para que se presenten ante el sacerdote Aarón y le sirvan. Le colaborarán a Aarón y a toda la comunidad en lo que tiene que ver con la carpa del encuentro y harán el trabajo pesado[a] en la Carpa Sagrada. Ellos deberán vigilar todo el equipo de la carpa del encuentro y harán guardia en representación de los israelitas. Harán el trabajo pesado en la Carpa Sagrada. Tú deja a los levitas a cargo de Aarón y sus hijos porque de entre todos los israelitas, los levitas se dedicarán totalmente a colaborar conmigo[b]. 10 Tú nombrarás a Aarón y a sus hijos como sacerdotes, pues ellos serán los encargados de realizar esa labor. Cualquier otro que trate de hacer las labores de un sacerdote será condenado a muerte».

11 El SEÑOR le dijo a Moisés: 12 «Mira, he tomado a los levitas de entre los israelitas a cambio de los hijos mayores de la comunidad de Israel. Los levitas serán míos 13 porque todo hijo mayor es mío. Cuando hice morir a todos los hijos mayores en Egipto, tomé para mí todos los hijos mayores de Israel. Serán míos tanto los hijos mayores de los seres humanos, como las primeras crías de los animales, porque yo soy el SEÑOR».

Censo de los levitas

14 El SEÑOR le dijo a Moisés en el desierto del Sinaí: 15 «Haz un censo de todos los levitas de un mes de edad en adelante, por grupos familiares y familias».

16 Entonces Moisés hizo el censo tal como el SEÑOR le ordenó.

17 Los hijos de Leví eran Guersón, Coat y Merari.

18 Los grupos familiares de Guersón eran Libní y Simí.

19 Los grupos familiares de Coat eran Amirán, Izar, Hebrón y Uziel.

20 Los grupos familiares de Merari eran Majlí y Musí.

Esos eran los grupos familiares de los levitas por sus familias.

21 Los grupos familiares de Libní y Simí eran de Guersón; eran grupos familiares guersonitas. 22 Según el censo, el número de varones de un mes de edad en adelante era de 7500. 23 Los grupos familiares guersonitas acampaban detrás de la Carpa Sagrada en el lado occidental. 24 Su jefe era Eliasaf hijo de Lael. 25 Los guersonitas tenían la labor de vigilancia[c] de la carpa del encuentro. Esto incluía la Carpa Sagrada, la carpa exterior, su cubierta, la cortina de la entrada de la carpa del encuentro, 26 las cortinas del patio, la cortina de la entrada del patio alrededor de la Carpa Sagrada y el altar y las cuerdas correspondientes. También les correspondía todo el trabajo pesado relacionado con esto.

27 Los grupos familiares de Amirán, Izar, Hebrón y Uziel eran de Coat; eran grupos familiares coatitas. 28 Ellos cuidaban las cosas sagradas. Según el censo, el número de varones de un mes de edad en adelante era de 8300[d]. 29 Los grupos familiares coatitas acampaban al lado sur de la Carpa Sagrada. 30 Su jefe era Elizafán hijo de Uziel. 31 Ellos estaban a cargo del cuidado del Cofre Sagrado, la mesa, el soporte de la lámpara y los altares, y también de los utensilios sagrados que eran usados en ellos y la cortina. Realizaban todo el trabajo pesado relacionado con esos utensilios.

32 El jefe principal de los levitas era Eleazar, hijo del sacerdote Aarón. Eleazar supervisaba el trabajo de los que tenían a su cuidado las cosas sagradas.

33 Los grupos familiares de Majlí y Musí eran de Merari; eran los grupos familiares meraritas. 34 Según el censo, el número de varones de un mes de edad en adelante era de 6200. 35 El jefe de la familia de los meraritas era Zuriel hijo de Abijaíl. Ellos acampaban al lado norte de la Carpa Sagrada. 36 Los meraritas tenían bajo su responsabilidad el soporte estructural de la Carpa Sagrada, sus travesaños, postes y bases. Ellos estaban a cargo del cuidado de todo el equipo de la Carpa Sagrada y del trabajo pesado relacionado con este. 37 También eran responsables de los postes del patio alrededor de la carpa, con sus bases, estacas y cuerdas.

38 Moisés, Aarón y sus hijos acampaban en el lado oriental al frente de la Carpa Sagrada. Estaban al frente de la carpa del encuentro por el lado que sale el sol. Ellos cuidaban el área sagrada en representación de los israelitas. Se condenaba a muerte al que se atreviera a acercarse al área sagrada sin ser de la familia de Aarón o si no era sacerdote.

39 Moisés y Aarón hicieron el censo de los levitas por grupos familiares tal como lo ordenó el SEÑOR. El resultado final del censo dio un total de 22 000 hombres de un mes de edad en adelante.

Los levitas toman el lugar de los hijos mayores

40 El SEÑOR le dijo a Moisés: «Haz un censo de todos los hijos mayores de los israelitas de un mes de edad en adelante, y haz también una lista con sus nombres. 41 Aparta para mí a los levitas a cambio de cada hijo mayor de los israelitas. Haz lo mismo con los animales de los levitas a cambio de cada una de las primeras crías de los animales de los israelitas. Yo soy el SEÑOR».

42 Entonces Moisés contó a todos los hijos mayores de los israelitas tal como el SEÑOR le había mandado. 43 Se colocó en la lista a cada varón de un mes de edad en adelante, y el total fue de 22 273.

44 El SEÑOR le dijo a Moisés: 45 «Toma a los levitas en reemplazo de cada primer varón nacido entre los israelitas y también toma a los animales de los levitas en reemplazo de los animales de los israelitas. Los levitas son míos, pues yo soy el SEÑOR. 46 Hay más hijos mayores de los israelitas que la cifra total de levitas. La diferencia es de 273 hijos mayores de los israelitas para los que no hay levitas que los reemplacen, 47 entonces para rescatarlos pide cinco monedas de plata por cada uno de ellos. Los tomarás de acuerdo al peso oficial que establece que cada moneda de plata debe pesar 11 gramos.[e] 48 Les darás ese dinero a Aarón y a sus hijos como valor del rescate de esos 273 hijos mayores».

49 Entonces Moisés tomó el dinero del rescate de los hijos mayores de los israelitas que había de más. 50 El dinero que recibió Moisés por ellos fue un total de 1365 monedas de plata conforme al peso oficial. 51 De acuerdo a lo que el SEÑOR le dijo, Moisés les entregó el dinero a Aarón y a sus hijos tal como lo ordenó el SEÑOR.

La labor de los levitas

El SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: «Hagan un censo de los coatitas que hay entre los levitas por grupos familiares y familias; que tengan entre los 30 y 50 años de edad, y sean aptos para trabajar en la carpa del encuentro. El trabajo de los coatitas en lo que tiene que ver con la carpa del encuentro será el de hacerse cargo del transporte de las cosas más sagradas.

»Cuando se movilice el campamento, Aarón y sus hijos deberán entrar a la carpa y quitar la cortina de la entrada. Luego cubrirán el cofre del pacto con ella, y pondrán encima una cubierta de cuero de delfín. Después extenderán una tela morada sobre ella y le colocarán los palos para transportarla, y extenderán también una tela morada sobre la mesa de la presencia y pondrán en ella los platos, las cucharas, los tazones y las jarras para las ofrendas de vino. El pan de la ofrenda permanente estará también ahí. Extenderán una tela roja sobre esto, cubrirán la mesa con una cubierta de cuero de delfín y después le colocarán los palos para transportarla.

»Después tomarán una tela morada y cubrirán con ella el candelabro, sus lámparas, las tenazas, los platillos y todas las jarras de aceite utilizadas en la lámpara. 10 Luego pondrán esto y su equipo en una cubierta de cuero de delfín y colocarán todo eso sobre unos palos para cargarlo. 11 También extenderán una tela morada sobre el altar de oro, lo cubrirán con una cubierta de cuero de delfín y le pondrán sus palos para cargarlo.

12 »Después tendrán que tomar todas las piezas del equipo usado para servir en el lugar sagrado. Los pondrán en una tela morada, los cubrirán con cuero de delfín y después los colocarán sobre sus palos para cargarlo.

13 »Luego deberán limpiar las cenizas del altar y extender una tela morada sobre este. 14 Después pondrán sobre el altar todos los utensilios que se usan para el servicio, o sea las tenazas, los tenedores, las palas y los tazones, todo el equipo del altar. Sobre este deberán extender una cubierta de cuero de delfín y luego poner todo esto sobre sus palos para cargarlo.

15 »Aarón y sus hijos terminarán de cubrir todo el equipo sagrado y todos los objetos sagrados. Una vez el campamento esté listo para moverse, entonces los coatitas podrán venir a cargar todo esto. Pero ellos no deberán tocar las cosas sagradas para que no mueran. Los coatitas cargarán las cosas de la carpa del encuentro.

16 »Eleazar, hijo del sacerdote Aarón, estará a cargo del aceite para la lámpara, del incienso aromático, de la ofrenda diaria de cereal[f] y del aceite de consagrar. Él también será responsable del cuidado de toda la Carpa Sagrada y de todo lo que hay en ella. Responderá por las cosas sagradas y por sus utensilios».

17 Luego el SEÑOR les dijo a Moisés y a Aarón: 18 «No dejen que ninguno de los grupos familiares de los coatitas sea separado[g] de los levitas. 19 Ellos deberán hacer lo siguiente para que no mueran al tocar las cosas más sagradas: Aarón y sus hijos entrarán y le enseñarán a cada uno de ellos el trabajo que deben hacer y lo que tienen que cargar. 20 Los coatitas no deben intentar mirar las cosas sagradas ni siquiera por un instante porque si lo hacen morirán».

21 El SEÑOR le dijo a Moisés: 22 «Haz también un censo de los guersonitas por familias y por grupos familiares. 23 Cuenta a los que tengan entre los 30 y 50 años de edad, o sea todos los que sean aptos para trabajar en la carpa del encuentro.

24 »El trabajo de los guersonitas es empacar y mover. 25 Ellos transportarán las cortinas de la Carpa Sagrada, la carpa del encuentro y su cubierta y la cubierta de cuero de delfín que está encima de ella. También transportarán la cortina de la entrada de la carpa del encuentro. 26 Ellos deben transportar también las cortinas del patio, el armazón a la entrada de la puerta del patio que rodea la Carpa Sagrada y el altar, sus cuerdas y todos sus utensilios y accesorios necesarios para realizar su trabajo. 27 Aarón y sus hijos supervisarán todo el trabajo de los guersonitas, todo lo que muevan y empaquen. Tú deberás hacerlos responsables de cuidar todo lo que movilicen. 28 Ese es el trabajo de los guersonitas en la carpa del encuentro y lo que tienen a su cargo. Esto lo harán bajo la dirección de Itamar hijo del sacerdote Aarón.

29 »También haz un censo de los meraritas por grupos familiares y familias. 30 Cuenta a los que tengan entre los 30 y 50 años de edad, o sea todos los que sean aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 31 En cuanto a su trabajo en la carpa del encuentro, ellos transportarán las tablas de la Carpa Sagrada, sus travesaños, postes y bases. 32 También los postes del patio alrededor, sus bases, estacas y cuerdas, todo su equipo. Haz una lista por nombre de todo lo que ellos tienen que cuidar y cargar. 33 Ese es el trabajo de los meraritas en lo que respecta a la carpa del encuentro. Esto lo harán bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón».

34 Moisés, Aarón y los jefes de la comunidad hicieron el censo de los coatitas por sus grupos familiares y familias. 35 Contaron a todos los hombres entre 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 36 El resultado del censo por grupos familiares fue de 2750 hombres. 37 Esos fueron los hombres contados de los grupos familiares coatitas para trabajar en la carpa del encuentro. Moisés y Aarón los contaron conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés.

38 Se hizo también el censo de los guersonitas por grupos familiares y familias. 39 Contaron a todos los hombres entre 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 40 El resultado del censo por grupos familiares fue de 2630. 41 Esos fueron los hombres contados de los grupos familiares guersonitas para trabajar en la carpa del encuentro. Moisés y Aarón los contaron conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés.

42 Los meraritas también fueron censados por grupos familiares y familias. 43 Contaron a todos los hombres entre los 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar en la carpa del encuentro. 44 El resultado del censo por grupos familiares fue de 3200. 45 Esos fueron los hombres contados de los grupos familiares meraritas. Moisés y Aarón los contaron conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés.

46 Así pues, Moisés, Aarón y los jefes de la comunidad hicieron el censo de todos los levitas por grupos familiares y familias. 47 Contaron a todos los hombres entre 30 y 50 años de edad, o sea todos los aptos para trabajar, manejar y transportar todo lo de la carpa del encuentro. 48 El total de este censo fue de 8580 hombres. 49 Ese censo se hizo conforme a lo ordenado por el SEÑOR a Moisés. A cada uno se le dijo lo que debía hacer y lo que debía transportar, todo tal como el SEÑOR le mandó a Moisés.

Pureza del campamento

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Ordena a los israelitas que saquen del campamento a todo el que tenga en los genitales un flujo fuera de lo normal de sangre o de pus y a todo el que se haya contaminado por tocar un muerto. Los sacarán del campamento, sean hombres o mujeres, para que no contaminen el campamento donde yo vivo con ustedes».

Los israelitas obedecieron y sacaron del campamento a toda esa gente, tal como el SEÑOR le dijo a Moisés.

Multa por daños y perjuicios

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Diles a los israelitas que en caso de que alguien, hombre o mujer, peque causándole un daño a otro, está traicionando al SEÑOR, y es culpable. El que hace eso deberá confesar el pecado que cometió y pagar a la persona defraudada el costo del daño que le causó más una quinta parte de su valor. Si se da el caso de que la persona ofendida ha muerto y no tiene parientes para recibir el pago, entonces ese pago se entregará al SEÑOR. El sacerdote recibirá el pago. Además, el que cometió la ofensa deberá llevarle al sacerdote un carnero para que haga la ceremonia de purificación del que cometió la ofensa.

»Toda donación santa que los israelitas consagren y entreguen al sacerdote, pertenecerá al sacerdote. 10 Lo que cada cual consagre es suyo, pero lo que se entregue al sacerdote, será para el sacerdote».[h]

Ley en casos de celos

11 El SEÑOR le dijo a Moisés: 12 «Diles a los israelitas que se puede dar el caso de que la esposa de un hombre le sea infiel. 13 Otro hombre tiene relaciones sexuales con ella sin que lo sepa el marido y aunque ella ya se ha contaminado, mantiene el secreto porque no hubo testigos ni fue sorprendida en el acto. 14 El marido es presa de los celos contra su esposa porque ella se ha contaminado. También puede darse el caso de que un marido se ponga celoso aunque su esposa no se haya contaminado. 15 En esos casos, el marido deberá llevar a su esposa ante el sacerdote junto con una ofrenda que se requiere por ella. La ofrenda será de 2 kilos[i] de harina de cebada. A esa ofrenda no se le echará aceite ni se le colocará incienso porque es una ofrenda de cereal de un esposo celoso. Es una ofrenda de cereal hecha para poner al descubierto un pecado.

16 »Luego el sacerdote hará que la mujer se acerque ante el SEÑOR. 17 Después pondrá un poco de agua consagrada en una jarra de arcilla y le echará un poco de tierra tomada del suelo de la Carpa Sagrada. 18 Entonces el sacerdote hará que la mujer se acerque ante el SEÑOR, le soltará el pelo y pondrá en sus manos la ofrenda de cereal para exponer su culpa. En la mano del sacerdote estará el agua que lleva una maldición.

19 »Luego el sacerdote hará que la mujer jure y le dirá: “No te afectará la maldición que lleva esta agua si eres inocente, si ningún hombre ha tenido relaciones sexuales contigo, si no has ido por el mal camino ni te has contaminado mientras has estado casada con tu esposo. 20 Pero el Señor hará recaer sobre ti la maldición que lleva esta agua si eres culpable, si te fuiste por el mal camino mientras has estado casada con tu esposo, si te contaminaste, si un hombre que no es tu esposo ha tenido relaciones sexuales contigo”. 21 En ese momento el sacerdote hará que la mujer jure bajo maldición y luego le dirá a la mujer: “Que el SEÑOR haga que tu pueblo use tu nombre cuando maldigan a otros, que el SEÑOR te haga estéril, que tus entrañas se hinchen, 22 que esta agua que lleva una maldición vaya dentro de tu cuerpo y haga que tus entrañas se hinchen y quedes estéril”. Luego la mujer debe decir: “Estoy de acuerdo, así sea”.

23 »Después el sacerdote escribirá estas maldiciones en un documento y las lavará con el agua amarga. 24 Entonces hará que la mujer beba el agua que lleva la maldición; el agua entrará en ella para causarle gran dolor. 25 Luego el sacerdote tomará de manos de la mujer la ofrenda de cereal de su esposo celoso y hará el movimiento de presentación de la ofrenda ante el SEÑOR y la llevará al altar. 26 En seguida el sacerdote tomará un puñado de la ofrenda de cereal como representación de toda la ofrenda, y lo quemará en el altar. Después de esto hará que la mujer tome el agua. 27 Una vez haya ella bebido el agua se verán los resultados. Si ella es impura y le fue infiel a su esposo, entonces el agua que lleva la maldición entrará en ella y le hará daño. Su embarazó se echará a perder y será maldita entre su gente. 28 Si la mujer no es culpable, será considerada pura y su embarazo legítimo.

29 »Esa es la ley para los casos de celos, cuando una mujer toma el mal camino mientras se encuentra casada con su esposo y se contamina. 30 Es también para cuando un hombre se pone celoso con su esposa. Entonces él debe hacer que ella se presente ante el SEÑOR y el sacerdote hará que se aplique esta ley. 31 De esa forma el esposo quedará libre de castigo, pero el castigo de la mujer se deja en manos de Dios».

Los nazareos

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Diles a los israelitas que si un hombre o una mujer hace la promesa de dedicarse al SEÑOR como nazareo, tendrá que abstenerse de tomar vino u otra bebida fuerte. Tampoco puede tomar vinagre hecho de vino o de bebida fuerte, ni tomar ningún jugo de uva, ni comer uvas, ya sean frescas o secas. Todo el tiempo que sea nazareo no debe comer ningún producto de la uva, ni siquiera las semillas o la cáscara.

»Durante el tiempo que dure su promesa de nazareo no debe cortarse el cabello. Sólo podrá hacerlo cuando se complete el tiempo que dedicó a consagrarse al SEÑOR. Mientras tanto está consagrado y debe dejarse crecer el cabello.

»Además, mientras dure el tiempo de su dedicación al SEÑOR no podrá entrar en ningún lugar donde haya un muerto, ni siquiera en caso que mueran su papá o su mamá, o su hermano o su hermana. Se haría impuro porque su cabello indica que se ha dedicado a Dios.[j] Todos los días consagrados como nazareo serán sagrados para el SEÑOR.

»Si alguien muere de repente junto a un nazareo, eso contamina el cabello del nazareo, así que siete días más tarde tendrá que raparse el cabello, o sea el día de su purificación. 10 Al octavo día llevará dos tórtolas o dos pichones de paloma al sacerdote, a la entrada de la carpa del encuentro. 11 El sacerdote ofrecerá una como sacrificio por el pecado y la otra como sacrificio que debe quemarse completamente. Hará la purificación del nazareo porque falló al tener contacto con un muerto. Ese mismo día consagrará de nuevo su cabeza. 12 Comenzará otra vez el tiempo de consagración al SEÑOR y deberá traer un cordero de un año como sacrificio de restitución. Los días anteriores no se tomarán en cuenta por haberse contaminado el cabello.

13 »Esta ley debe aplicarse al nazareo: El día que complete el tiempo de consagración como nazareo, alguien irá con él a la entrada de la carpa del encuentro. 14 Allí presentará al SEÑOR un cordero de un año que no tenga ningún defecto, como sacrificio que debe quemarse completamente. También ofrecerá un carnero que no tenga ningún defecto, como ofrenda para festejar. 15 Ofrecerá así mismo una canasta de panes sin levadura, hechos con harina de la mejor calidad y amasados con aceite. También ofrecerá galletas sin levadura rociadas con aceite, junto con las ofrendas correspondientes de grano y de vino.

16 »Entonces el sacerdote presentará estas ofrendas ante el SEÑOR junto con el sacrificio por el pecado y el sacrificio que debe quemarse completamente. 17 Ofrecerá el carnero al SEÑOR como una ofrenda para festejar, junto con la canasta de panes sin levadura y las correspondientes ofrendas de grano y de vino.

18 »Después el nazareo deberá raparse el cabello y echarlo al fuego que arde bajo la ofrenda para festejar.

19 »Luego que el nazareo se haya rapado la cabeza, el sacerdote tomará una pierna ya cocida del carnero, y sacará de la canasta un pan sin levadura y una galleta sin levadura. Enseguida pondrá todo eso en las manos del nazareo. 20 Entonces el sacerdote hará el movimiento de presentación de la ofrenda ante el SEÑOR. Todo esto pertenece al sacerdote junto con el pecho del animal que se utilizó para el movimiento de presentación de la ofrenda y el muslo que se da como ofrenda de contribución. Después de esto el nazareo podrá tomar vino.

21 »Esa es la ley para el que haga la promesa de consagrarse al SEÑOR como nazareo, y esas son las ofrendas que debe presentar, además de cualquier otra cosa que pueda ofrecer. De acuerdo a la promesa que haga, así deberá cumplir, conforme a la ley de su consagración».

La bendición del sacerdote

22 El SEÑOR le dijo a Moisés: 23 «Diles a Aarón y a sus hijos que bendigan a los israelitas diciéndoles esto:

24 “Que el SEÑOR te bendiga
    y te proteja;
25 que el SEÑOR sea bueno contigo[k]
    y te tenga compasión.
26 Que el SEÑOR te mire con amor[l]
    y te haga vivir en paz”.

27 De esa forma Aarón y sus hijos pronunciarán mi nombre ante los israelitas y yo los bendeciré».

Dedicación de la Carpa Sagrada

Cuando Moisés acabó de armar la Carpa Sagrada, consagró con aceite la carpa y sus utensilios e hizo lo mismo con el altar y sus utensilios. Luego vinieron y trajeron ofrendas los jefes de Israel, o sea los jefes de las familias y de las tribus, los mismos que ayudaron a hacer el censo. Trajeron ante el SEÑOR como ofrenda seis carretas cubiertas y doce bueyes; o sea una carreta por cada dos jefes y un buey por cada jefe. Ellos los pusieron frente a la Carpa Sagrada.

Así que el SEÑOR le dijo a Moisés: «Recíbeles estas ofrendas de carretas y bueyes, y dáselas a los levitas para que las pongan al servicio de las actividades de la carpa del encuentro, conforme al trabajo que le corresponda a cada uno».

Entonces Moisés recibió las carretas y el ganado y se los repartió a los levitas. Les dio dos carretas y cuatro bueyes a los guersonitas, pues eso era lo que ellos necesitaban para hacer su trabajo; cuatro carretas y ocho toros a los meraritas, pues eso era también lo que ellos necesitaban para hacer su trabajo bajo la dirección de Itamar, hijo del sacerdote Aarón. No les dio nada de eso a los coatitas porque el trabajo de cargar las cosas sagradas lo debían hacer ellos mismos, sobre sus hombros.

10 Cuando se consagró el altar, los jefes de las tribus también trajeron ofrendas y las colocaron delante del altar. 11 Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés: «Que cada día venga un jefe de tribu distinto y traiga su ofrenda para la consagración del altar».

12 El que presentó su ofrenda el primer día fue Naasón hijo de Aminadab, de la tribu de Judá.

13 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio[m] y un tazón de plata que pesaba 800 gramos según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 14 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 15 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 16 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 17 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Naasón hijo de Aminadab.

18 El segundo día llevó su ofrenda Natanael, hijo de Zuar, jefe de la tribu de Isacar.

19 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 20 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos lleno de incienso. 21 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 22 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 23 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Natanael hijo de Zuar.

24 El tercer día llevó sus ofrendas Eliab, hijo de Helón, jefe de la tribu de Zabulón.

25 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 26 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 27 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 28 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 29 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Eliab, hijo de Helón.

30 El cuarto día llevó sus ofrendas Elisur, hijo de Sedeúr, jefe de la tribu de Rubén.

31 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 32 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 33 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 34 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 35 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Elisur, hijo de Sedeúr.

36 El quinto día llevó sus ofrendas Selumiel, hijo de Zurisaday, jefe de la tribu de Simeón.

37 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 38 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos lleno de incienso. 39 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 40 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 41 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Selumiel, hijo de Zurisaday.

42 El sexto día llevó sus ofrendas Eliasaf, hijo de Deuel, jefe de la tribu de Gad.

43 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 44 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 45 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 46 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 47 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Eliasaf, hijo de Deuel.

48 El séptimo día llevó sus ofrendas Elisama, hijo de Amiud, jefe de la tribu de Efraín.

49 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 50 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 51 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 52 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 53 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Elisama, hijo de Amiud.

54 El octavo día llevó sus ofrendas Gamaliel, hijo de Pedasur, jefe de la tribu de Manasés.

55 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 56 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 57 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 58 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 59 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Gamaliel, hijo de Pedasur.

60 El noveno día llevó sus ofrendas Abidán, hijo de Gedeoni, jefe de la tribu de Benjamín.

61 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 62 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 63 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 64 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 65 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Abidán, hijo de Gedeoni.

66 El décimo día llevó sus ofrendas Ajiezer, hijo de Amisadai, jefe de la tribu de Dan.

67 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 68 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 69 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 70 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 71 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Ajiezer, hijo de Amisadai.

72 El día once llevó sus ofrendas Paguiel, hijo de Ocrán, jefe de la tribu de Aser.

73 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 74 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 75 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 76 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 77 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Paguiel, hijo de Ocrán.

78 El día doce llevó sus ofrendas Ajirá, hijo de Enán, jefe de la tribu de Neftalí.

79 En esto consistía su ofrenda: una bandeja de plata que pesaba kilo y medio, y un tazón de plata que pesaba 800 gramos, según el peso oficial, para la ofrenda de cereal. Ambos los entregó llenos de harina de la mejor calidad mezclada con aceite. 80 Ofrendó también un cucharón de oro que pesaba 110 gramos, lleno de incienso. 81 Dio también un ternero, un carnero y un cordero de un año, para el sacrificio que debe quemarse completamente. 82 Ofrendó, además, un chivo, para el sacrificio por el pecado. 83 Finalmente, para la ofrenda para festejar, dio 2 toros, 5 carneros, 5 chivos y 5 corderos de un año. Esa fue la ofrenda de Ajirá, hijo de Enán.

84 Esa fue la ofrenda de dedicación de los jefes de Israel para el altar cuando este fue consagrado: 12 bandejas de plata, 12 tazones de plata y 12 cucharones de oro. 85 Cada bandeja de plata pesaba kilo y medio. Cada tazón de plata pesaba 800 gramos. Todos los objetos de plata pesaban 27 kilos según el peso oficial. 86 Los 12 cucharones de oro llenos de incienso pesaban cada uno 110 gramos, según el peso oficial. El oro de todos los cucharones pesaba en total 1 kilo y 400 gramos.

87 El número total de animales para el sacrificio que debe quemarse completamente era de 12 terneros, 12 carneros y 12 corderos de un año con sus correspondientes ofrendas de cereal. También había 12 chivos para el sacrificio por el pecado. 88 En cuanto a los animales para la ofrenda para festejar, su número total era de 24 terneros, 60 carneros, 60 chivos y 60 corderos de un año. Esta fue la ofrenda para la dedicación del altar después de que este fue consagrado.

89 Cuando Moisés entró a la carpa del encuentro para hablar con Dios, escuchó la voz de Dios que le hablaba desde encima de la tapa del cofre del pacto, en medio de los dos querubines.

La luz del candelabro

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Dile a Aarón que cuando instale las siete lámparas, estas deben alumbrar hacia el frente del candelabro». Entonces Aarón hizo tal como el SEÑOR le ordenó a Moisés y ubicó las lámparas de forma que quedaran alumbrando delante del candelabro. El candelabro desde su base hasta sus flores estaba hecho de oro martillado, y se hizo tal y conforme al modelo que el SEÑOR le mostró a Moisés.

Dedicación de los levitas

El SEÑOR le dijo a Moisés: «Toma a los levitas de entre los israelitas y purifícalos[n]. Esto es lo que debes hacer para purificarlos: rocía sobre ellos agua de purificación[o], haz que se afeiten todo el cuerpo y que laven su ropa; así quedarán purificados. Después, que tomen un ternero y harina de la mejor calidad, mezclada con aceite, para que hagan la ofrenda de cereal correspondiente, y también otro ternero para que hagan el sacrificio por el pecado. En seguida, lleva a los levitas al frente de la carpa del encuentro y reúne a toda la comunidad de Israel. 10 Cuando traigas a los levitas ante el SEÑOR, los israelitas les deberán imponer las manos. 11 Aarón presentará a los levitas haciendo el movimiento de presentación como una ofrenda de los israelitas para el SEÑOR y así quedarán dedicados al servicio del SEÑOR. 12 Los levitas a su vez pondrán sus manos sobre las cabezas de los dos terneros y será ofrecido uno como sacrificio por el pecado, y el otro como sacrificio que debe quemarse completamente al SEÑOR, para purificar a los levitas.

13 »Luego, tú harás que los levitas se coloquen de pie frente a Aarón y sus hijos y harás el movimiento de presentación de la ofrenda al SEÑOR para dedicármelos. 14 De esa forma, separarás a los levitas de los demás israelitas para que sean míos.

15 »Después de que los hayas purificado y que los hayas ofrecido haciendo el movimiento de presentación de la ofrenda, los levitas estarán calificados para trabajar en la carpa del encuentro. 16 Así que los levitas, de entre los israelitas, serán un grupo de gente puesto aparte para mi servicio. Yo he hecho que ellos ocupen el lugar de los hijos mayores de los israelitas en mi servicio, 17 porque todo hijo mayor de los israelitas, tanto de seres humanos como de animales, es mío. El día que yo di muerte a todos los hijos mayores de Egipto, yo aparté para mí a los hijos mayores de los israelitas. 18 Sin embargo, tomé a los levitas a cambio de todos los hijos mayores de los israelitas, 19 y de entre todos los israelitas les di los levitas a Aarón y a sus hijos. Ellos harán, en nombre de los israelitas, el trabajo pesado en la carpa del encuentro y purificarán a los israelitas para que así no les ocurra ninguna desgracia por acercarse al santuario».

20 Moisés, Aarón y toda la comunidad de Israel hicieron todo lo que el SEÑOR le ordenó a Moisés respecto a los levitas. 21 Los levitas se purificaron a sí mismos y lavaron su ropa. Luego Aarón los ofreció haciendo el movimiento de presentación ante el SEÑOR, y presentó los sacrificios para el perdón de los pecados de los levitas y para purificarlos. 22 Después de esto los levitas se fueron a realizar sus labores en la carpa del encuentro bajo la supervisión de Aarón y sus hijos. Lo que se hizo con los levitas fue tal y como el SEÑOR le había ordenado a Moisés que se hiciera.

23 El SEÑOR le dijo a Moisés: 24 «Esta es una ley para los levitas: a partir de los 25 años de edad todo hombre levita entrará al servicio de la carpa del encuentro, 25 pero se retirará a la edad de 50 años y no trabajará más; 26 podrá ayudar a sus hermanos haciendo guardia en la carpa del encuentro, pero no hará ningún trabajo pesado. Esa es la forma como debes organizar el trabajo de los levitas».

La Pascua

El SEÑOR habló a Moisés en el desierto del Sinaí en el primer mes del segundo año después de salir de Egipto. Él dijo: «Los israelitas deben celebrar la Pascua en la fecha determinada, que es al atardecer del día 14 de este mes. La celebrarán siguiendo todas sus leyes y normas».

Entonces Moisés les ordenó a los israelitas que celebraran la Pascua y ellos la celebraron el día 14 del primer mes. La celebraron en el desierto del Sinaí al atardecer, cumpliendo todo lo que el SEÑOR le había ordenado a Moisés.

Pero había algunos que estaban impuros por haber tocado un muerto y por eso no podían celebrar la Pascua ese día. Así que fueron a ver a Aarón y a Moisés y le dijeron a Moisés: «Estamos impuros por haber tocado un muerto, ¿por qué se nos impide presentar la ofrenda para el SEÑOR en el momento indicado como lo hacen el resto de los israelitas?»

Moisés les dijo: «Esperen, yo averiguaré lo que el SEÑOR decide sobre ustedes».

El SEÑOR le dijo a Moisés: 10 «Diles a los israelitas: Puede darse el caso de que alguno de ustedes o de sus descendientes esté impuro por haber tocado un muerto o por estar de viaje fuera del país. En ese caso, pueden celebrar la Pascua del SEÑOR 11 el día 14 del segundo mes, al atardecer. Deben comer el cordero de Pascua con pan sin levadura y hierbas amargas. 12 No deben dejar nada para la mañana siguiente, ni romper ninguno de los huesos del cordero. Cuando celebren la Pascua, lo harán respetando toda su reglamentación. 13 Por otra parte, puede darse el caso de que alguien esté puro y no se encuentre de viaje, pero se niegue a celebrar la Pascua. Ese será separado de la comunidad porque no ofreció la ofrenda del SEÑOR en el momento indicado y recibirá el castigo por su pecado.

14 »Si un inmigrante vive entre ustedes y desea celebrar la Pascua del SEÑOR, podrá hacerlo, pero deberá seguir las leyes de la Pascua con todas sus normas. Las normas serán iguales tanto para los ciudadanos como para los inmigrantes».

La nube y el fuego

(Éx 40:34-38)

15 El día en que se instaló la Carpa Sagrada, la nube cubrió la Carpa Sagrada, o sea la carpa del Testimonio. Desde el atardecer se empezaba a ver algo como una especie de fuego que duraba hasta el amanecer. 16 Siempre era así, durante el día la nube cubría la carpa; durante la noche se veía como fuego. 17 Cuando la nube que cubría la carpa se levantaba, entonces los israelitas se ponían en marcha; y donde la nube se detenía, allí acampaban. 18 A la señal del SEÑOR los israelitas se ponían en marcha y a la señal del SEÑOR acampaban. Ellos acampaban todo el tiempo que la nube estuviera sobre la Carpa Sagrada. 19 Aunque la nube se detuviera sobre la Carpa Sagrada por varios días, los israelitas obedecían el mandato del SEÑOR y no se movían de ahí. 20 Igual sucedía cuando la nube estaba sobre la Carpa Sagrada sólo unos pocos días; a una señal del SEÑOR ellos acampaban y a una señal del SEÑOR se ponían en marcha. 21 A veces la nube estaba sobre la carpa sólo desde el atardecer hasta el amanecer y se movía en la mañana, entonces ellos se ponían en marcha. Fuera de día o de noche, cuando la nube se levantaba, ellos se ponían en marcha. 22 Aunque la nube permaneciera sobre la Carpa Sagrada un día, un mes o un año, los israelitas acampaban y no se movían de ahí, pero cuando la nube se movía, ellos se movían también. 23 A una señal del SEÑOR ellos acampaban y a una señal del SEÑOR se ponían en marcha, obedeciendo las órdenes del SEÑOR, las cuales el SEÑOR daba a través de Moisés.

Las trompetas de plata

10 El SEÑOR le dijo a Moisés: «Haz dos trompetas de plata martillada y úsalas para convocar a la comunidad y para avisarle a los campamentos cuándo ponerse en marcha. Cuando se toquen ambas trompetas, toda la comunidad se reunirá ante ti a la entrada de la carpa del encuentro. Pero si sólo suena una trompeta, entonces se reunirán contigo únicamente los jefes más importantes de Israel.

»Los sonidos cortos de las trompetas serán la señal para ponerse en marcha. Al toque de los primeros sonidos cortos, los campamentos del oriente se pondrán en marcha. Cuando se toquen sonidos cortos por segunda vez, los campamentos del sur se pondrán en marcha. Los sonidos cortos serán la señal para ponerse en marcha. Pero cuando se quiera convocar a toda la comunidad, el sonido será diferente: se tocarán sonidos largos, no se tocarán sonidos cortos. Los hijos de Aarón, los sacerdotes, serán los encargados de tocar las trompetas. Esta será una ley que siempre obedecerán todos ustedes y también las generaciones por venir.

»Cuando estén en su tierra y el enemigo los ataque, ustedes tendrán que salir a pelear. En esas ocasiones toquen las trompetas y griten fuerte, así yo, el SEÑOR su Dios, les prestaré atención y los salvaré de sus enemigos. 10 Las trompetas también deberán tocarse en ocasiones de alegría, como en los días de fiesta y en sus fiestas de Luna Nueva. También se tocarán cuando ofrezcan sus ofrendas que deben quemarse completamente y sus ofrendas para festejar. Así yo me acordaré de ustedes[p] porque yo soy el SEÑOR su Dios».

Los israelitas viajan del Sinaí a Parán

11 El día 20 del segundo mes del segundo año la nube se levantó de la carpa del pacto. 12 Entonces el pueblo de Israel comenzó su viaje desde el desierto del Sinaí hasta el desierto de Parán que fue donde la nube se detuvo. 13 Así que ellos se pusieron en marcha por primera vez a la señal del SEÑOR a través de Moisés. 14 La unidad militar del campamento de los descendientes de Judá se movió primero, por tropas. Naasón hijo de Aminadab estaba al mando de esta unidad militar, 15 Natanael hijo de Zuar estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Isacar, 16 y Eliab hijo de Helón estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Zabulón. 17 Luego, desarmaron la Carpa Sagrada y los guersonitas y meraritas que eran los encargados de transportarla se pusieron en marcha después.

18 Luego, la unidad militar del campamento de Rubén se puso en marcha por tropas. Elisur hijo de Sedeúr estaba al mando de esta unidad militar. 19 Selumiel hijo de Zurisaday estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Simeón 20 y Eliasaf hijo de Deuel estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Gad. 21 Luego, los coatitas, que cargaban las cosas sagradas, se pusieron en marcha. Cuando ellos llegaban al nuevo campamento, encontraban la Carpa Sagrada ya instalada.

22 Luego la unidad militar del campamento de Efraín se puso en marcha por tropas. Elisama hijo de Amiud estaba al mando de esta unidad militar. 23 Gamaliel hijo de Pedasur estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Manasés, 24 y Abidán hijo de Gedeoni estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Benjamín.

25 Luego la unidad militar del campamento de Dan se puso en marcha por tropas. Esta unidad militar estaba a la retaguardia de todos los campamentos. Ajiezer hijo de Amisadai estaba a cargo de esta unidad militar. 26 Paguiel hijo de Ocrán estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Aser, 27 y Ajirá hijo de Enán estaba al mando de la unidad militar de la tribu de Neftalí. 28 Este era el orden de avanzada de los israelitas por unidades militares cuando se ponían en marcha.

29 En una ocasión, Moisés le dijo a su suegro Hobab, hijo de Deuel el madianita:

—Nos vamos al lugar que el SEÑOR dijo que nos daría. Ven con nosotros y te trataremos con generosidad porque el SEÑOR ha prometido ser generoso con los israelitas.

30 Pero Hobab le dijo:

—Yo no voy con ustedes, mejor me voy a mi tierra a donde está mi familia.

31 Entonces Moisés le dijo:

—Por favor, no nos dejes porque tú sabes dónde podemos acampar en el desierto y nos servirás de guía. 32 Si vienes con nosotros, compartiremos contigo todo lo bueno que el SEÑOR nos dé.[q]

33 Entonces ellos se fueron de la montaña del SEÑOR y viajaron por tres días. El cofre del pacto del SEÑOR viajó frente a ellos esos tres días. Iban en busca de un sitio para acampar. 34 Desde que dejaron su campamento la nube del SEÑOR estaba sobre ellos durante el día. 35 Cada vez que se iba a poner en marcha el Cofre Sagrado, Moisés decía:

«¡Levántate, SEÑOR!
    Que se dispersen tus enemigos
    y huyan de ti los que te odian».

36 Pero cuando el cofre se detenía, Moisés decía:

«¡Regresa[r], SEÑOR,
    a las incontables multitudes de Israel!»

El pueblo sigue quejándose

11 Un día los israelitas comenzaron a quejarse a oídos del SEÑOR de los problemas por los que estaban pasando. El SEÑOR los escuchó y se enojó tanto que envió un fuego que incendió los alrededores del campamento. La gente pidió a gritos ayuda a Moisés, él oró al SEÑOR por ellos y el fuego se apagó. Entonces ellos llamaron ese lugar Taberá[s] porque un fuego del SEÑOR se prendió entre ellos.

Entre los israelitas había gente de toda condición que se había mezclado con ellos y sólo pensaba en comer. Los israelitas se dejaron llevar por ellos y se pusieron a llorar y a decir: «¡Quién nos diera carne para comer! Cómo extrañamos el pescado que comíamos gratis en Egipto, y los pepinos, melones, puerros, cebollas y ajos. Ahora estamos cansados de comer siempre lo mismo, todo lo que hay es este maná». El maná era como semillas de cilantro y parecía resina de árbol. La gente salía a recolectarlo y después lo molían o lo machacaban con piedras. Luego lo cocinaban en una olla o hacían panes con él. Su sabor era como el del pan que se amasa con aceite. Al caer el rocío por la noche, también caía el maná sobre el campamento.

10 Moisés escuchó llorar a los israelitas y a sus familias, cada uno a la entrada de su carpa. El SEÑOR se enojó mucho. Moisés también se enojó 11 y le dijo al SEÑOR:

—¿Por qué me tratas tan mal a mí que soy tu siervo? ¿Qué tienes en mi contra para poner sobre mí la responsabilidad de este pueblo? 12 ¿Es que yo soy la mamá de toda esta gente? ¿Fui yo quien los dio a luz para que tú me digas: “Llévalos en tus brazos, como hace un padre adoptivo”, a la tierra que tú les prometiste a sus antepasados? 13 ¿Dónde conseguiré carne para darle a toda esta gente cuando vengan llorando ante mí y me digan: “¡Danos carne para comer!”? 14 Yo solo no soy capaz de cuidar a todo este pueblo; eso es mucho para mí. 15 Si me vas a tratar de esta manera, te ruego que me quites la vida, pues así me libraré de tanto problema.

16 El SEÑOR le dijo a Moisés:

—Reúneme a 70 ancianos de Israel, pero asegúrate que sean jefes del pueblo. Llévalos a la carpa del encuentro y que esperen allí contigo. 17 Yo bajaré a hablar contigo y tomaré parte del Espíritu[t] que está en ti y lo pondré en ellos. Así ellos compartirán contigo la carga que este pueblo representa para ti, de tal forma que no tengas que hacerte cargo de ellos tú solo. 18 Después dile al pueblo: “Purifíquense para mañana, pues van a comer carne. Ustedes han llorado ante el SEÑOR y han dicho: ¡Quién nos diera carne para comer! Estábamos mejor en Egipto. El SEÑOR les va a dar carne y ustedes van a comer carne. 19 No comerán carne sólo un día, o dos, o cinco, o diez o veinte días, 20 sino que comerán carne por todo un mes hasta que se les salga por la nariz y les provoque náuseas. Eso les sucederá por haber rechazado al SEÑOR que está en medio de ustedes, y por haber llorado ante él diciendo: ¿Por qué tuvimos que irnos de Egipto?”

21 Entonces Moisés respondió:

—Estoy en medio de un ejército de 600 000 hombres y tú dices: “Yo les daré a comer carne por todo un mes”. 22 Si se degollaran todos los rebaños y manadas, ¿habría suficiente para darles de comer a todos ellos? Y si pescáramos todos los peces del mar, ¿les alcanzaría?

23 El SEÑOR le dijo a Moisés:

—¿Es que acaso el poder del SEÑOR tiene límites? Ahora verás si lo que he dicho sucede o no.

24 Entonces Moisés salió y le dijo a la gente lo que el SEÑOR había dicho. Reunió a 70 hombres de los ancianos de Israel e hizo que se colocaran alrededor de la carpa. 25 Luego el SEÑOR bajó en la nube y le habló a Moisés; tomó una parte del Espíritu que estaba en Moisés y lo puso en los 70 ancianos. Cuando el Espíritu descansó en ellos comenzaron a profetizar; pero esto no volvió a repetirse.

26 Dos de los ancianos se quedaron en el campamento. Uno de ellos se llamaba Eldad y el otro Medad. El Espíritu descansó sobre ellos que eran de los ancianos escogidos, aunque no habían ido a la carpa con los demás. Entonces empezaron a profetizar en el campamento. 27 Un joven corrió y le dijo a Moisés:

—¡Eldad y Medad están profetizando en el campamento!

28 Josué hijo de Nun, que era ayudante de Moisés desde su juventud,[u] le dijo a Moisés:

—¡Moisés, señor, prohíbeles hacer eso!

29 Pero Moisés le dijo a Josué:

—¿Estás celoso por mí? Cuánto quisiera yo que todo el pueblo del SEÑOR profetizara, y que el SEÑOR pusiera su Espíritu en ellos.

30 Luego Moisés y los ancianos de Israel volvieron al campamento.

Cumplimiento de la promesa del Señor

31 El SEÑOR hizo soplar un viento que trajo del mar bandadas de codornices que cayeron alrededor del campamento. Había codornices en una extensión de hasta un día de camino alrededor del campamento y a una altura de hasta casi un metro del suelo. 32 La gente se levantó y recogió codornices todo el día, toda la noche y todo el día siguiente. El que menos recogió, recogió dos toneladas y distribuyeron las codornices por todo el campamento.

33 No habían todavía comenzado a masticar la carne cuando el SEÑOR se enojó con ellos y les envió el SEÑOR una terrible enfermedad. 34 Entonces ellos llamaron ese sitio Tumbas de la glotonería[v] porque allí enterraron a la gente que no pensaba sino en comer.

35 Del sitio Tumbas de la glotonería el pueblo viajó hasta Jazerot y ahí se quedó.

Miriam y Aarón critican a Moisés

12 Miriam y Aarón criticaron a Moisés porque se había casado con una mujer etíope. Ellos dijeron: «¿Ha hablado el SEÑOR solamente a través de Moisés? ¿No ha hablado a través de nosotros también?», pero el SEÑOR escuchó lo que decían.

En verdad Moisés era muy humilde, más humilde que cualquier otro hombre en la tierra, así que el SEÑOR les dijo a Moisés, a Aarón y a Miriam: «Vengan los tres a la carpa del encuentro». Entonces los tres fueron allá, y el SEÑOR bajó en una columna de nube, se detuvo a la entrada de la carpa y llamó a Aarón y a Miriam. Entonces cuando ellos se acercaron él les dijo: «Escuchen mis palabras:

»Cuando hay un profeta entre ustedes,
    yo, el SEÑOR, me comunico con él en visión,
    le hablo en sueños.
Sin embargo, así no es como yo hablo con mi siervo Moisés,
    pues nadie en toda mi casa es tan fiel como él.
Yo le hablo a él directamente,
    con claridad y sin acertijos.
Él ve el aspecto del SEÑOR,
    ¿cómo es que ustedes se atrevieron
    a criticar a mi siervo Moisés?»

El SEÑOR se enojó mucho con ellos y se marchó. 10 En cuanto la nube se quitó de encima de la carpa, Miriam quedó leprosa, con la piel blanca como la nieve. Cuando Aarón se volvió hacia Miriam y la vio así, 11 le dijo a Moisés, «Oh señor, no nos castigues, pues hemos pecado tontamente. 12 Te ruego que no dejes que ella quede como un niño muerto antes de nacer. Una vez nuestra mamá dio a luz a una criatura con la piel medio desecha».

13 Entonces Moisés le suplicó al SEÑOR: «¡Oh Dios, te suplico que la sanes!»

14 Luego el SEÑOR le dijo a Moisés: «Si el papá de ella le hubiera escupido en la cara, ¿no habría durado su humillación siete días? Entonces que la mantengan fuera del campamento por siete días, después de los cuales se le permitirá entrar de nuevo al campamento».

15 Entonces ellos dejaron a Miriam fuera del campamento por siete días. El pueblo permaneció en ese lugar hasta que regresó Miriam. 16 Después de esto el pueblo dejó Jazerot y acampó en el desierto de Parán.

Se envían espías a Canaán

(Dt 1:19-25)

13 El SEÑOR le dijo a Moisés: «Envía algunos hombres a explorar Canaán, el territorio que les voy a dar a los israelitas. De cada tribu envía un hombre que sea jefe entre los suyos».

Entonces Moisés los envió al desierto de Parán cumpliendo la orden del SEÑOR. Todos los hombres eran jefes de los israelitas. Estos eran ellos:

Samúa hijo de Zacur, de la tribu de Rubén;

Safat hijo de Horí, de la tribu de Simeón;

Caleb hijo de Jefone, de la tribu de Judá;

Igal hijo de José, de la tribu de Isacar;

Oseas hijo de Nun, de la tribu de Efraín;

Palti hijo de Rafú, de la tribu de Benjamín;

10 Gadiel hijo de Sodi, de la tribu de Zabulón;

11 Gadí hijo de Susi, de la tribu de José, o sea de la tribu de Manasés;

12 Amiel hijo de Guemalí, de la tribu de Dan;

13 Setur hijo de Micael, de la tribu de Aser;

14 Najbí hijo de Vapsi, de la tribu de Neftalí,

15 y Geuel hijo de Maquí, de la tribu de Gad.

16 Esos eran los hombres que Moisés envió a espiar el territorio. En cuanto a Oseas hijo de Nun, Moisés le cambió el nombre y lo llamó Josué.

17 Cuando Moisés los envió a explorar la tierra de Canaán, les dijo:

—Vayan de aquí hacia el Néguev y luego hacia la zona montañosa. 18 Observen cómo es el territorio; vean si la gente que vive ahí es fuerte o débil, si son pocos o muchos, 19 buenos o malos. Fíjense cómo son sus ciudades, si están a campo abierto o si son fortificadas y si la tierra es buena o mala, 20 fértil o pobre, y si hay árboles. Hagan todo lo mejor que puedan y traigan algunos frutos de la tierra.

Esto sucedió en la época de la primera cosecha de uvas. 21 Entonces ellos fueron y exploraron el territorio desde el desierto de Zin a Rejob por Lebó Jamat. 22 Subieron hasta el Néguev y fueron a Hebrón donde vivían Ajimán, Sesay y Talmay, descendientes de Anac. La ciudad de Hebrón fue construida siete años antes que la ciudad de Zoán en Egipto. 23 Luego fueron al valle de Escol, donde cortaron una rama con un racimo de uvas que cargaron sobre un palo entre dos hombres. También llevaron higos y granadas. 24 A ese lugar se le llamó valle de Escol[w] debido al racimo de uvas que los israelitas cortaron allí. 25 Volvieron de explorar la tierra después de 40 días 26 y se presentaron a Moisés, a Aarón y a toda la comunidad de los israelitas. Estaban en el desierto de Parán, en Cades, y fue allí donde les dieron a todos un informe y les mostraron el fruto de esa tierra. 27 Le informaron a Moisés, así:

—Fuimos al territorio a donde nos enviaste y en verdad es una tierra que rebosa de leche y de miel, aquí pueden ver sus frutos. 28 Pero la gente que la habita es fuerte, las ciudades son fortificadas y muy grandes, incluso vimos allí a los descendientes de Anac.[x] 29 Los amalecitas viven en la tierra del Néguev; los hititas, jebuseos y los amorreos viven en la zona montañosa, y los cananeos viven al lado del mar y a lo largo del río Jordán.

30 Luego Caleb le pidió a la gente que estaba cerca de Moisés que se callara y dijo:

—¡Vamos y apoderémonos de esa tierra! Con seguridad que la conquistaremos.

31 Pero los espías que fueron con él dijeron:

—No seremos capaces de atacar a esa gente porque ellos son más fuertes que nosotros.

32 Luego esparcieron falsos rumores entre los israelitas acerca de la tierra que exploraron, diciendo:

—La tierra que exploramos es una tierra que se traga a la gente que vive en ella. Toda la gente que vimos era enorme, 33 basta con decirles que vimos incluso a los Nefilim[y]. Los descendientes de Anac vienen de los Nefilim. Ante ellos nos sentimos como saltamontes y así les parecíamos nosotros a ellos.

El pueblo se queja de nuevo

14 Entonces toda la comunidad se puso a gritar y los israelitas lloraron toda la noche. Todos los israelitas hablaban mal de Moisés y de Aarón y decían: «¡Mejor hubiera sido morir en Egipto, o morir de una vez en este desierto! ¿A qué nos trae el SEÑOR a esta tierra? ¿A morir en combate y a que nuestras esposas e hijos sirvan de botín del enemigo? ¿No será mejor regresarnos a Egipto?» Luego se decían unos a otros: «Nombremos un jefe y volvamos a Egipto».

Lo que decía la gente horrorizó tanto a Moisés y a Aarón que se tiraron al suelo delante de todos. Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone, dos de los que exploraron la tierra, rasgaron su ropa en señal de desacuerdo y de tristeza y le dijeron a toda la comunidad:

—La tierra que exploramos es una tierra muy buena. Si el SEÑOR está satisfecho con nosotros, él nos llevará a esta tierra y nos la dará; es una tierra que rebosa de leche y de miel. Así que no se rebelen contra el SEÑOR, y no le tengan miedo a la gente de esa tierra porque los derrotaremos fácilmente. Ellos no tienen quien los proteja, en cambio el SEÑOR está con nosotros, así que no hay que tenerle miedo a esa gente.

10 Toda la comunidad amenazó con matarlos a pedradas, pero justo en ese momento la gloria del SEÑOR se apareció a todos los israelitas en la carpa del encuentro. 11 El SEÑOR le dijo a Moisés:

—¿Por cuánto tiempo esta gente me despreciará? ¿Por cuánto tiempo ellos no creerán en mí a pesar de todos los milagros que he hecho entre ellos? 12 Ya no serán mi pueblo. Les mandaré una plaga terrible para matarlos. Empezaré de nuevo contigo y haré de ti una nación más grande y más poderosa que ellos.

13 Entonces Moisés le dijo al SEÑOR:

—Pero tú sacaste con poder a este pueblo de entre los egipcios, quienes se enterarán de lo que suceda, 14 y se lo contarán a los habitantes de esta tierra. Ellos han oído hablar de ti, SEÑOR, y saben que estás con este pueblo y que tú, SEÑOR, te apareces a simple vista. Saben que tu nube se coloca sobre ellos, y que vas en frente de ellos en tu columna de nube en el día, y en tu columna de fuego en la noche. 15 Si tú acabas con este pueblo de un solo golpe, entonces las naciones que han oído de ti, dirán: 16 “El SEÑOR no fue capaz de llevar a esta gente a la tierra que les prometió, así que decidió matarlos en el desierto”. 17 Así que ahora, muestra Señor tu gran poder como has prometido: 18 “El SEÑOR no se enoja fácilmente debido a su fiel amor. Él perdona el pecado y la rebelión, aunque no deja sin castigo al culpable sino que castiga por el pecado de los padres, a los hijos, nietos, bisnietos y tataranietos”. 19 Entonces, te ruego que por tu fiel amor perdones el pecado de este pueblo, tal como los has perdonado desde que salieron Egipto hasta ahora.

Dios no permite entrar a Canaán

(Dt 1:34-40)

20 El SEÑOR dijo:

—Yo los perdono, así como me pides, 21 pero mientras yo viva y toda la tierra esté llena de la gloria del SEÑOR, hago esta promesa: 22 Todos los que vieron mi gloria y los que vieron los milagros que hice en Egipto y en el desierto, me han probado estas diez veces y no me obedecieron. 23 Todos ellos, todos los que me despreciaron, no verán la tierra que les prometí a sus antepasados, no entrarán en esa tierra. 24 En cambio, mi siervo Caleb se ha portado distinto, pues él me sigue completamente. Por eso lo llevaré a la tierra que estuvo explorando y sus descendientes la poseerán. 25 Los amalecitas y los cananeos están viviendo en el valle. Así que ustedes, mañana den vuelta y vayan al desierto por el camino del mar Rojo.

26 El SEÑOR también les dijo a Moisés y a Aarón:

27 —¿Hasta cuándo voy a tener que aguantar las quejas de esta comunidad perversa? He escuchado lo mal que hablan de mí los israelitas. 28 Ve y diles: “Yo, el SEÑOR, prometo por mí mismo que haré que les suceda a ustedes exactamente lo mismo que les he oído decir. 29 Todos los que se quejaron contra mí, los mayores de 20 años de edad que quedaron registrados en el censo, morirán en el desierto. 30 Ninguno de ustedes entrará en la tierra en la que les prometí que los iba a establecer. Sólo entrarán Caleb hijo de Jefone y Josué hijo de Nun. 31 Y sus niños, que ustedes pensaban que serían capturados, a ellos los llevaré a esa tierra. Serán ellos los que disfruten[z] la tierra que ustedes rechazaron 32 y ustedes morirán en este desierto. 33 Ellos serán pastores en el desierto por 40 años, sufriendo por la infidelidad de ustedes, hasta que todos ustedes hayan muerto en el desierto. 34 Así como ustedes estuvieron 40 días explorando el territorio, así también estarán 40 años sufriendo su castigo, un año por cada día. Eso es para que aprendan qué es lo que sucede cuando se ponen en contra mía.[aa] 35 Yo, el SEÑOR, he hablado y les aseguro que haré que todo esto le suceda a esta comunidad perversa que se unió en contra mía; todos morirán en este desierto”.

36 Respecto a los hombres que Moisés envió a explorar el territorio, esos que volvieron y esparcieron falsos rumores que hicieron que el pueblo se quejara, 37 el SEÑOR los hizo morir de una terrible enfermedad. 38 Sólo Josué hijo de Nun y Caleb hijo de Jefone quedaron con vida.

La derrota en Jormá

(Dt 1:41-46)

39 Cuando Moisés les contó todo esto a los israelitas, el pueblo quedó muy triste. 40 Se levantaron temprano en la mañana y comenzaron a dirigirse a la parte más alta de la zona montañosa. Dijeron:

—Pues ya que estamos aquí, subiremos al lugar que dijo el SEÑOR porque reconocemos nuestro pecado.

41 Entonces Moisés les dijo:

—¿Por qué están desobedeciendo otra vez el mandato del SEÑOR? Ese intento no tendrá éxito. 42 No suban a atacar ese territorio porque el SEÑOR no está con ustedes y sus enemigos los van a derrotar.

Footnotes

  1. 3:7 trabajo pesado Los levitas eran responsables de transportar, armar y desarmar la Carpa Sagrada.
  2. 3:9 conmigo Según LXX y Pentateuco Samaritano. TM: a él. Ver Nm 8:16.
  3. 3:25 labor de vigilancia o responsabilidad.
  4. 3:28 8300 Según algunos manuscritos de LXX; TM: 8600. Ver Nm 3:22, 28, 34, 39.
  5. 3:47 cinco monedas […] 11 gramos Textualmente cinco siclos por cabeza, conforme al siclo sagrado, el cual pesa 20 guerás. Ver tabla de pesas y medidas.
  6. 4:16 ofrenda diaria de cereal Ofrenda a Dios que se colocaba dos veces al día en el lugar sagrado.
  7. 4:18 separado Esto puede referirse tanto a su destrucción como a su expulsión.
  8. 5:10 o Cada persona puede disponer de sus ofrendas como bien le parezca, pero lo que la persona entregue al sacerdote será para el sacerdote.
  9. 5:15 2 kilos Textualmente la décima parte de un efa. Generalmente cuando se mencionan en este libro medidas de harina en kilos, textualmente se dan en efas.
  10. 6:7 su cabello […] Dios o el signo de dedicación a Dios está sobre su cabeza.
  11. 6:25 sea bueno contigo Textualmente haga brillar su rostro sobre ti.
  12. 6:26 mire con amor Textualmente alce sobre ti su rostro.
  13. 7:13 kilo y medio Textualmente 130 siclos. Generalmente las medidas de peso que en este libro se presentan en kilogramos para metales se dan textualmente en siclos. Ver tabla de pesas y medidas.
  14. 8:6 purifícalos Presentarlos puros o aceptables a Dios para la adoración.
  15. 8:7 agua de purificación La forma de preparar el agua de purificación está explicada en el capítulo 19.
  16. 10:10 me acordaré de ustedes Textualmente un recordatorio ante su Dios.
  17. 10:32 contigo […] nos dé Por menciones posteriores a Hobab y su familia en Jue 1:16 y 4:11 se puede asumir que Hobab aceptó marchar con los israelitas.
  18. 10:36 Regresa o Descansa.
  19. 11:3 Taberá Esta palabra significa arder.
  20. 11:17 Espíritu o espíritu. También en los versículos 25 y 29.
  21. 11:28 desde su juventud o uno de sus hombres escogidos.
  22. 11:34 Tumbas de la glotonería Textualmente Quibrot Hatavá.
  23. 13:24 Escol Este nombre se parece a la palabra hebrea que significa racimo de uvas.
  24. 13:28 descendientes de Anac Cananeos de gran estatura. La expresión descendientes de Anac vino a equivaler a gigantes.
  25. 13:33 Nefilim Raza de gigantes que vivieron antes del diluvio. Algunas veces se traduce como gigantes. Este nombre viene de la palabra hebrea que significa pueblo que ha caído. Después, fue un pueblo famoso de grandes y poderosos guerreros. Ver Gn 6:2-4.
  26. 14:31 disfruten Textualmente conocerán.
  27. 14:34 lo que […] contra mía o lo que significa para ustedes frustrarme. Textualmente mi frustración.