2 Reyes 19:32-37

La Biblia de las Américas

³² Por tanto, así dice el Señor acerca del rey de Asiria: “El no entrará en esta ciudad, ni lanzará allí flecha alguna; tampoco vendrá delante de ella con escudo, ni levantará terraplén contra ella^(A). ³³ Por el camino que vino, por él se volverá^(B), y no entrará en esta ciudad” —declara el Señor. ³⁴ Porque defenderé esta ciudad para salvarla por amor a mí mismo^(C) y por amor a mi siervo David^(D)».

Muerte de Senaquerib

³⁵ Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel del Señor e hirió a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios; cuando los demás se levantaron por la mañana, he aquí, todos eran cadáveres^(E). ³⁶ Senaquerib, rey de Asiria, partió y regresó a su tierra^(F), y habitó en Nínive^(G). ³⁷ Y sucedió que mientras él adoraba en la casa de su dios Nisroc, Adramelec y Sarezer^[a] lo mataron a espada^(H) y huyeron a la tierra de Ararat^(I). Y su hijo^(J) Esar-hadón reinó en su lugar.