Jeremías 26:2-11
Nueva Biblia de las Américas
2 «Así dice el Señor: “Ponte en el atrio de la casa del Señor, y habla a todas las ciudades de Judá(A) que vienen a adorar en la casa del Señor(B), todas las palabras que te he mandado decirles(C). No omitas ni una palabra(D). 3 Tal vez escuchen y cada uno se vuelva de su mal camino, y Yo me arrepienta del mal que pienso hacerles a causa de la maldad de sus obras(E)”. 4 Tú les dirás: “Así dice el Señor: ‘Si no me escuchan(F), para andar en Mi ley que he puesto delante de ustedes(G), 5 para que escuchen las palabras de Mis siervos los profetas que les he enviado repetidas veces[a], pero no los han escuchado(H), 6 entonces pondré esta casa como Silo(I), y esta ciudad la pondré por maldición para todas las naciones de la tierra(J)’”».
7 Los sacerdotes, los profetas(K) y todo el pueblo oyeron a Jeremías decir estas palabras en la casa del Señor. 8 Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el Señor le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas(L) y todo el pueblo, diciendo: «De cierto, morirás. 9 ¿Por qué has profetizado en nombre del Señor, diciendo: “Esta casa será como Silo y esta ciudad quedará desolada sin habitante alguno(M)?”». Y todo el pueblo se congregó(N) contra Jeremías en la casa del Señor.
10 Cuando los jefes de Judá oyeron estas cosas(O), subieron de la casa del rey a la casa del Señor, y se sentaron a la entrada de la puerta Nueva de la casa del Señor(P). 11 Entonces los sacerdotes y los profetas hablaron a los jefes y a todo el pueblo, y les dijeron: «¡Sentencia de muerte para este hombre(Q)!, porque ha profetizado contra esta ciudad, como han oído con sus propios oídos(R)».
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- 26:5 Lit. madrugando y enviando.
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