Jeremías 4:25-27

La Biblia de las Américas

²⁵ Miré, y he aquí que no había hombre alguno,
y todas las aves del cielo habían huido^(A).
²⁶ Miré, y he aquí que la tierra fértil^[a] era un desierto^(B),
y todas sus ciudades estaban arrasadas
delante del Señor, delante del ardor de su ira.