Un dia a la Vez

En familia

Busquen al Señor mientras se deje encontrar, llámenlo mientras esté cercano.
Isaías 55:6

Es importante entender el valor que Dios le da a la familia. ¿Has pensado en cuántos sábados o fines de semana no has estado en casa? ¿Desde cuándo no complaces a tu familia con ir a algún parque o un restaurante? Debes saber que tu primera obligación es, y será siempre, tu familia. Dios instituyó la familia para que estuviéramos acompañados y para que pasáramos tiempo juntos.

Quizá sea la mañana de este sábado y te das cuenta que te identificas con mis palabras. A lo mejor ya tienes planeado el día con tus amigos y no has tenido en cuenta a tus hijos ni a tu pareja. Estás en tiempo de cambiar los planes y aprovechar la familia que te entregó Dios.

En caso de que al mirar a tu alrededor estés solo porque no tengas familia, tal vez digas: «Pero bueno, ¿y yo qué hago?». Quiero que sepas que Dios está contigo. Él es tu Padre, tu Amigo, tu Consejero.

Aprovecha esta oportunidad de tener un momento a solas con Dios. Reflexiona en las bendiciones que te ha dado Él y entonces dedica este día para ti. ¿Qué tal si vas a la playa, visitas un amigo, sales a caminar o haces lo que más te gusta?

Dale gracias a Dios por tu familia dondequiera que esté.