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Bible in 90 Days

An intensive Bible reading plan that walks through the entire Bible in 90 days.
Duration: 88 days
Nueva Traducción Viviente (NTV)
Version
Levítico 1:1-14:32

Procedimiento para las ofrendas quemadas

El Señor llamó a Moisés desde el tabernáculo[a] y le dijo: «Da las siguientes instrucciones al pueblo de Israel: cuando presentes un animal como ofrenda al Señor, lo puedes tomar de la manada del ganado o del rebaño de ovejas y cabras.

»Si el animal que ofreces como ofrenda quemada es de la manada, debe ser un macho que no tenga ningún defecto. Llévalo a la entrada del tabernáculo para que seas[b] aceptado por el Señor. Coloca la mano sobre la cabeza del animal, y el Señor aceptará la muerte del animal en tu lugar a fin de purificarte y hacerte justo ante él.[c] Luego matarás al becerro en la presencia del Señor, y los hijos de Aarón, los sacerdotes, ofrecerán la sangre del animal al salpicarla por todos los lados del altar que está a la entrada del tabernáculo. Después se le quitará la piel al animal y se cortará en pedazos. Los hijos del sacerdote Aarón encenderán un fuego de leña sobre el altar, y acomodarán los pedazos de la ofrenda, junto con la cabeza y la grasa, sobre la leña que arde en el altar. Sin embargo, las vísceras y las patas deben lavarse primero con agua. Después el sacerdote quemará el sacrificio completo sobre el altar como ofrenda quemada. Es una ofrenda especial, un aroma agradable al Señor.

10 »Si el animal que ofreces como ofrenda quemada es del rebaño, podrá ser una oveja o una cabra, pero deberá ser un macho sin defecto. 11 Matarás al animal en el lado norte del altar en la presencia del Señor, y los hijos de Aarón, los sacerdotes, salpicarán su sangre por todos los lados del altar. 12 Luego cortarás al animal en pedazos, y los sacerdotes acomodarán los pedazos de la ofrenda, junto con la cabeza y la grasa, sobre la leña que arde en el altar. 13 Sin embargo, las vísceras y las patas deben lavarse primero con agua. Después el sacerdote quemará el sacrificio completo sobre el altar como ofrenda quemada. Es una ofrenda especial, un aroma agradable para el Señor.

14 »Si ofreces un ave como ofrenda quemada al Señor, elegirás una tórtola o un pichón de paloma. 15 El sacerdote llevará el ave al altar, le arrancará la cabeza y la quemará sobre el altar; pero primero deberá escurrir la sangre y dejarla correr sobre un costado del altar. 16 El sacerdote también debe quitarle el buche y las plumas,[d] y echarlos en las cenizas al lado oriental del altar. 17 Luego, sujetando el ave por las alas, el sacerdote la abrirá, pero sin despedazarla. Después la quemará como ofrenda quemada sobre la leña que arde en el altar. Es una ofrenda especial, un aroma agradable al Señor.

Procedimiento para la ofrenda de grano

»Cuando presentes grano como una ofrenda al Señor, deberá ser de harina selecta. Derramarás sobre la harina aceite de oliva, la rociarás con incienso y la llevarás a los hijos de Aarón, los sacerdotes. El sacerdote tomará un puñado de la harina humedecida con aceite, junto con todo el incienso, y quemará esta porción representativa sobre el altar. Es una ofrenda especial, un aroma agradable al Señor. Luego, el resto de la ofrenda de grano será entregado a Aarón y a sus hijos. Esta ofrenda será considerada una porción sumamente santa entre las ofrendas especiales presentadas al Señor.

»Si la ofrenda es de grano cocido al horno, debe ser de harina selecta, pero sin levadura. Se puede presentar en la forma de panes planos mezclados con aceite de oliva, o de obleas untadas con aceite de oliva. Si la ofrenda de grano se cocina en un sartén, debe ser de harina selecta humedecida con aceite de oliva, pero sin levadura. Pártela en pedazos y derrama sobre ella aceite de oliva; es una ofrenda de grano. Si la ofrenda de grano se cocina en una cacerola, debe ser de harina selecta y aceite de oliva.

»Cualquiera que sea la forma en que se prepare la ofrenda de grano para el Señor, la llevarás al sacerdote, quien la presentará en el altar. El sacerdote tomará una porción representativa de la ofrenda de grano y la quemará sobre el altar. Es una ofrenda especial, un aroma agradable al Señor. 10 El resto de la ofrenda de grano se entregará a Aarón y a sus hijos como alimento. Esta ofrenda será considerada una porción sumamente santa entre las ofrendas especiales presentadas al Señor.

11 »No uses levadura cuando prepares alguna de las ofrendas de grano que presentes al Señor, porque ni la levadura ni la miel deben ser quemadas como una ofrenda especial presentada al Señor. 12 Puedes ponerle levadura y miel a una ofrenda de las primeras cosechas, pero estas nunca deberán ser ofrecidas sobre el altar como un aroma agradable al Señor. 13 Sazona con sal todas tus ofrendas de grano, para acordarte del pacto eterno de Dios. Nunca te olvides de poner sal a las ofrendas de grano.

14 »Si presentas al Señor una ofrenda de grano de la primera porción de tu cosecha, lleva grano fresco, molido y tostado sobre el fuego. 15 Pon aceite de oliva sobre esta ofrenda de grano y échale incienso. 16 Luego el sacerdote tomará una porción representativa del grano humedecido con aceite, junto con todo el incienso, y la quemará como una ofrenda especial presentada al Señor.

Procedimiento para la ofrenda de paz

»Si presentas un animal de la manada como una ofrenda de paz al Señor, podrá ser macho o hembra, pero no debe tener ningún defecto. Pon tu mano sobre la cabeza del animal y mátalo a la entrada del tabernáculo.[e] Luego los hijos de Aarón, los sacerdotes, salpicarán la sangre por todos los lados del altar. El sacerdote presentará parte de esta ofrenda de paz como una ofrenda especial al Señor. Esto incluye toda la grasa que rodea las vísceras, los dos riñones junto con la grasa que los rodea cerca de los lomos, así como el lóbulo largo del hígado. Todo esto debe ser removido junto con los riñones. Entonces los hijos de Aarón lo quemarán encima de la ofrenda quemada, sobre la leña que arde en el altar. Es una ofrenda especial, un aroma agradable al Señor.

»Si presentas un animal del rebaño como una ofrenda de paz al Señor, podrá ser macho o hembra, pero no debe tener ningún defecto. Si presentas una oveja como ofrenda, llévala al Señor, coloca la mano sobre su cabeza y mátala frente al tabernáculo. Luego los hijos de Aarón salpicarán la sangre de la oveja por todos los lados del altar. El sacerdote debe presentar la grasa de esta ofrenda de paz como una ofrenda especial al Señor. Esto incluye la grasa de la cola gorda cortada cerca del espinazo, toda la grasa que rodea las vísceras, 10 los dos riñones junto con la grasa que los rodea cerca de los lomos, así como el lóbulo largo del hígado. Todo esto debe ser removido junto con los riñones, 11 y entonces el sacerdote lo quemará sobre el altar. Es una ofrenda especial de alimento que se presenta al Señor.

12 »Si presentas una cabra como ofrenda, llévala al Señor, 13 coloca la mano sobre su cabeza y mátala frente al tabernáculo. Luego los hijos de Aarón salpicarán la sangre de la cabra por todos los lados del altar. 14 El sacerdote presentará parte de esta ofrenda como una ofrenda especial al Señor. Esto incluye toda la grasa que rodea las vísceras, 15 los dos riñones junto con la grasa que los rodea cerca de los lomos, así como el lóbulo largo del hígado. Todo esto debe ser removido junto con los riñones, 16 y entonces el sacerdote lo quemará sobre el altar. Es una ofrenda especial de alimento, un aroma agradable al Señor. Toda la grasa le pertenece al Señor.

17 »Nunca deberás comer grasa ni sangre. Esta es una ley perpetua para ti que debe cumplirse de generación en generación, dondequiera que vivas».

Procedimiento para la ofrenda por el pecado

El Señor le dijo a Moisés: «Da las siguientes instrucciones al pueblo de Israel: de esta manera deben proceder con aquellos que pecan involuntariamente, al hacer algo que viola uno de los mandatos del Señor.

»Si el sumo sacerdote[f] peca y así mancha de culpa a toda la comunidad, debe presentar una ofrenda por el pecado que cometió. Debe ofrecer al Señor un becerro sin defecto. Debe llevar el becerro al Señor a la entrada del tabernáculo,[g] colocar su mano sobre la cabeza del becerro y matarlo delante del Señor. Luego, el sumo sacerdote llevará parte de la sangre dentro del tabernáculo, mojará su dedo en la sangre y la rociará siete veces ante el Señor delante de la cortina interior del santuario. Después el sacerdote pondrá un poco de la sangre en los cuernos del altar del incienso aromático que está en la presencia del Señor dentro del tabernáculo, y derramará el resto de la sangre del becerro al pie del altar de las ofrendas quemadas que está a la entrada del tabernáculo. Luego el sacerdote quitará toda la grasa del becerro para presentarla como ofrenda por el pecado. Esto incluye toda la grasa que rodea las vísceras, los dos riñones junto con la grasa que los rodea cerca de los lomos, así como el lóbulo largo del hígado. Debe quitar todo esto junto con los riñones, 10 así como lo hace con el ganado que se presenta como ofrenda de paz, y quemarlo sobre el altar de las ofrendas quemadas. 11 Pero debe tomar todo lo que quede del becerro—la piel, la carne, la cabeza, las patas, las vísceras y el estiércol— 12 y llevarlo fuera del campamento a un lugar ceremonialmente puro, al lugar donde se echan las cenizas. Allí, sobre el montón de las cenizas, lo quemará sobre un fuego de leña.

13 »Si toda la comunidad israelita peca al violar uno de los mandatos del Señor, pero no se da cuenta de ello, aun así es culpable. 14 En cuanto ellos se den cuenta de su pecado, deben llevar un becerro como una ofrenda por su pecado y presentarlo ante el tabernáculo. 15 Después los ancianos de la comunidad pondrán las manos sobre la cabeza del becerro y lo matarán ante el Señor. 16 Luego el sumo sacerdote llevará parte de la sangre del becerro dentro del tabernáculo, 17 mojará su dedo en la sangre y la rociará siete veces ante el Señor delante de la cortina interior. 18 Después pondrá un poco de la sangre en los cuernos del altar del incienso aromático que está en la presencia del Señor dentro del tabernáculo, y derramará el resto de la sangre al pie del altar de las ofrendas quemadas que está a la entrada del tabernáculo. 19 A continuación el sacerdote quitará toda la grasa del animal y la quemará sobre el altar, 20 así como lo hace con el becerro ofrecido como una ofrenda por el pecado del sumo sacerdote. Mediante este proceso, el sacerdote purificará a los israelitas y los hará justos ante el Señor,[h] y serán perdonados. 21 Después el sacerdote debe tomar todo lo que quede del becerro, llevarlo fuera del campamento y quemarlo allí, así como lo hace con la ofrenda por el pecado del sumo sacerdote. Esta ofrenda es por el pecado de toda la congregación de Israel.

22 »Si uno de los líderes de Israel peca al violar uno de los mandatos del Señor su Dios, pero no se da cuenta de ello, aun así es culpable. 23 En cuanto se dé cuenta de su pecado, debe llevar como ofrenda un chivo sin defecto. 24 Pondrá la mano sobre la cabeza del chivo y lo matará en el lugar donde se matan las ofrendas quemadas ante el Señor. Esta es una ofrenda por su pecado. 25 Luego el sacerdote mojará su dedo en la sangre de la ofrenda por el pecado y la pondrá en los cuernos del altar de las ofrendas quemadas, y derramará el resto de la sangre al pie del altar. 26 Después debe quemar toda la grasa del chivo sobre el altar, así como lo hace con la ofrenda de paz. Mediante este proceso, el sacerdote purificará al líder de su pecado, lo hará justo ante el Señor, y será perdonado.

27 »Si alguien de la gente común peca al violar uno de los mandatos del Señor, pero no se da cuenta de ello, aun así es culpable. 28 Cuando se dé cuenta de su pecado, deberá llevar como ofrenda por su pecado una cabra sin defecto. 29 Pondrá la mano sobre la cabeza de la ofrenda por el pecado y la matará en el lugar donde se matan las ofrendas quemadas. 30 Después el sacerdote mojará su dedo en la sangre y la pondrá en los cuernos del altar de las ofrendas quemadas, y derramará el resto de la sangre al pie del altar. 31 Luego quitará toda la grasa de la cabra, tal como lo hace con la grasa de la ofrenda de paz. Quemará la grasa sobre el altar, y será un aroma agradable al Señor. Mediante este proceso, el sacerdote purificará a la persona, la hará justa ante el Señor y será perdonada.

32 »Si lleva una oveja como ofrenda por el pecado, debe ser una hembra sin defecto. 33 Pondrá la mano sobre la cabeza de la ofrenda por el pecado y la matará en el lugar donde se matan las ofrendas quemadas. 34 Luego el sacerdote mojará su dedo en la sangre de la ofrenda por el pecado y la pondrá en los cuernos del altar de las ofrendas quemadas, y derramará el resto de la sangre al pie del altar. 35 Después deberá quitar toda la grasa de la oveja, tal como lo hace con la grasa de una oveja que se presenta como ofrenda de paz. Quemará la grasa sobre el altar encima de las ofrendas especiales presentadas al Señor. Mediante este proceso, el sacerdote purificará a la persona de su pecado, la hará justa ante el Señor, y será perdonada.

Pecados que requieren una ofrenda por el pecado

»Si te llaman a testificar sobre algo que hayas visto o que sepas, es pecado negarse a testificar, y serás castigado por tu pecado.

»O supongamos que, sin saberlo, tocas algo que queda ceremonialmente impuro, como el cadáver de un animal impuro. Cuando te des cuenta de lo que has hecho, debes admitir tu contaminación y tu culpabilidad. Esto rige por igual, ya sea un animal salvaje, un animal doméstico o un animal que corre por el suelo.

»O supongamos que, sin saberlo, tocas algo que te hace impuro. Cuando te des cuenta de lo que has hecho, debes admitir tu culpabilidad.

»O supongamos que haces un voto imprudente de cualquier clase, ya sea su propósito bueno o malo. Cuando te des cuenta de la necedad del voto, debes admitir tu culpabilidad.

»Cuando te des cuenta de tu culpabilidad en cualquiera de estos casos, deberás confesar tu pecado. Entonces deberás llevarle al Señor como castigo por tu pecado una hembra del rebaño, ya sea una oveja o una cabra. Esta es una ofrenda por el pecado, con la cual el sacerdote te purificará de tu pecado y te hará justo ante el Señor.[i]

»Sin embargo, si no te alcanza para comprar una oveja, puedes llevarle al Señor dos tórtolas o dos pichones de paloma como castigo por tu pecado. Una de las aves será la ofrenda por el pecado, y la otra será la ofrenda quemada. Las llevarás al sacerdote, quien presentará la primera ave como ofrenda por el pecado. Le arrancará el pescuezo, pero sin separar la cabeza del cuerpo. Después rociará un poco de la sangre de la ofrenda por el pecado en cada lado del altar, y escurrirá el resto de la sangre al pie del altar. Es una ofrenda por el pecado. 10 Luego el sacerdote preparará la segunda ave como ofrenda quemada, siguiendo los procedimientos establecidos. Mediante este proceso, el sacerdote te purificará de tu pecado, te hará justo ante el Señor y serás perdonado.

11 »Si no te alcanza para comprar las dos tórtolas o los dos pichones, podrás llevar dos litros[j] de harina selecta como ofrenda por tu pecado. Puesto que es una ofrenda por el pecado, no la humedecerás con aceite de oliva ni le pondrás incienso. 12 Lleva la harina al sacerdote, quien tomará un puñado como porción representativa. Él la quemará sobre el altar, encima de las ofrendas especiales presentadas al Señor. Es una ofrenda por el pecado. 13 Mediante este proceso, el sacerdote purificará a los que sean culpables de cualquiera de estos pecados, los hará justos ante el Señor, y serán perdonados. El resto de la harina selecta le pertenecerá al sacerdote, tal como la ofrenda de grano».

Procedimiento para la ofrenda por la culpa

14 El Señor le dijo a Moisés: 15 «Si uno de ustedes peca involuntariamente, al contaminar la propiedad sagrada del Señor, debe llevar al Señor una ofrenda por la culpa. La ofrenda puede ser un carnero sin defecto, de su propio rebaño, o puede comprar uno del mismo valor con plata calculada según el peso del siclo del santuario.[k] 16 La persona tiene que hacer restitución por la propiedad sagrada que dañó, pagando por la pérdida, más un veinte por ciento adicional. Cuando le entregue el pago al sacerdote, él lo purificará con el carnero sacrificado como ofrenda por la culpa, lo hará justo ante el Señor, y será perdonado.

17 »Supongamos que alguien peca al desobedecer uno de los mandatos del Señor. Aunque no esté consciente de lo que hizo, es culpable y será castigado por su pecado. 18 Como ofrenda por la culpa, debe llevar al sacerdote un carnero sin defecto de su propio rebaño, o puede comprar uno del mismo valor. Mediante este proceso, el sacerdote le purificará ese pecado cometido involuntariamente, lo hará justo ante el Señor, y será perdonado. 19 Esta es una ofrenda por la culpa, pues es culpable de una ofensa contra el Señor».

Pecados que requieren una ofrenda por la culpa

[l]Entonces el Señor le dijo a Moisés: «Supongamos que uno de ustedes peca contra su socio y es infiel al Señor. Supongamos que comete una estafa en un trato que involucra un depósito en garantía, o roba, o comete fraude, o encuentra un objeto perdido y luego niega haberlo encontrado, o miente después de haber jurado decir la verdad, o comete cualquier otro pecado como estos. Si has pecado en cualquiera de estas formas, eres culpable. Debes devolver lo que robaste, o el dinero que tomaste mediante la extorsión, o el depósito recibido en garantía, o el objeto perdido que encontraste, o cualquier cosa que hayas obtenido por jurar en falso. Deberás hacer una restitución total a la persona perjudicada más un veinte por ciento adicional. En el mismo día, presentarás una ofrenda por la culpa. Como ofrenda por la culpa al Señor, debes llevar al sacerdote un carnero sin defecto de tu propio rebaño, o puedes comprar uno del mismo valor. Mediante este proceso, el sacerdote te purificará delante del Señor, te hará justo ante él,[m] y serás perdonado de cualquiera de estos pecados que hayas cometido».

Instrucciones adicionales sobre la ofrenda quemada

[n]Entonces el Señor le dijo a Moisés: «Da a Aarón y a sus hijos las siguientes instrucciones con respecto a la ofrenda quemada: la ofrenda quemada se dejará encima del altar hasta la mañana siguiente, y el fuego del altar debe mantenerse encendido durante toda la noche. 10 En la mañana, después de que el sacerdote de turno se haya puesto las ropas oficiales de lino y también la ropa interior de lino, deberá limpiar las cenizas de la ofrenda quemada y ponerlas junto al altar. 11 Luego deberá quitarse estas vestiduras, cambiarse a su ropa normal y llevar las cenizas fuera del campamento a un lugar ceremonialmente puro. 12 Entre tanto, el fuego del altar debe mantenerse ardiendo; nunca deberá apagarse. Cada mañana el sacerdote le echará leña nueva al fuego. Luego acomodará la ofrenda quemada sobre él, y también quemará la grasa de las ofrendas de paz. 13 Recuerden, el fuego del altar siempre debe estar encendido; nunca debe apagarse.

Instrucciones adicionales sobre la ofrenda de grano

14 »Estas son las instrucciones con respecto a la ofrenda de grano: los hijos de Aarón deben presentar esta ofrenda al Señor delante del altar. 15 El sacerdote de turno tomará de la ofrenda de grano un puñado de harina selecta humedecida con aceite de oliva, junto con todo el incienso. Quemará esta porción representativa sobre el altar como un aroma agradable al Señor. 16 Aarón y sus hijos pueden comer el resto de la harina, pero debe ser horneada sin levadura y comida en un lugar sagrado dentro del atrio del tabernáculo.[o] 17 Recuerden, nunca se debe preparar con levadura; se la he dado a los sacerdotes como su porción de las ofrendas especiales que me presenten. Al igual que la ofrenda por el pecado y la ofrenda por la culpa, la ofrenda de grano es sumamente santa. 18 Cualquiera de los descendientes varones de Aarón podrá comer de estas ofrendas especiales presentadas al Señor; es su derecho perpetuo de generación en generación. Cualquier persona o cosa que toque estas ofrendas quedará consagrada».

Procedimiento para la ofrenda de ordenación

19 Entonces el Señor le dijo a Moisés: 20 «El día en que se unja a Aarón y a sus hijos, ellos deben presentar al Señor la ofrenda usual de grano de dos litros[p] de harina selecta; se ofrecerá la mitad por la mañana y la otra mitad por la tarde. 21 Debe ser mezclada cuidadosamente con aceite de oliva y cocinada en un sartén. Luego, esta ofrenda de grano la cortarán en rebanadas[q] y la presentarán como un aroma agradable al Señor. 22 En cada generación, el sumo sacerdote[r] que tome el lugar de Aarón deberá preparar esta misma ofrenda; le pertenece al Señor y debe ser quemada totalmente. Esta es una ley perpetua. 23 Tales ofrendas de grano hechas por un sacerdote deberán ser quemadas por completo; de esa ofrenda, nadie deberá comer».

Instrucciones adicionales sobre la ofrenda por el pecado

24 Entonces el Señor le dijo a Moisés: 25 «Da a Aarón y a sus hijos las siguientes instrucciones con respecto a la ofrenda por el pecado: el animal que se presente como ofrenda por el pecado es una ofrenda sumamente santa, y se debe matar en la presencia del Señor, en el lugar donde se matan las ofrendas quemadas. 26 El sacerdote que ofrezca el sacrificio como una ofrenda por el pecado deberá comer su porción en un lugar sagrado dentro del atrio del tabernáculo. 27 Toda persona o cosa que toque la carne del sacrificio será santa. Si la sangre del sacrificio llegara a salpicar la ropa de la persona, la ropa manchada deberá lavarse en un lugar sagrado. 28 Si se usa una olla de barro para hervir la carne del sacrificio, luego habrá que romperla. Si se usa una olla de bronce, esta deberá ser restregada y bien enjuagada. 29 Cualquier varón de la familia del sacerdote podrá comer de esta ofrenda; es sumamente santa. 30 Sin embargo, la ofrenda por el pecado no se deberá comer si su sangre fue llevada al tabernáculo como ofrenda para purificación[s] en el Lugar Santo. Deberá ser quemada por completo en el fuego.

Instrucciones adicionales sobre la ofrenda por la culpa

»Estas son las instrucciones para la ofrenda por la culpa; la cual es sumamente santa. El animal sacrificado como ofrenda por la culpa se debe matar en el lugar donde se matan las ofrendas quemadas, y su sangre debe ser salpicada por todos los lados del altar. Después, el sacerdote ofrecerá toda la grasa sobre el altar, que incluye la grasa de la cola gorda, la grasa que rodea las vísceras, los dos riñones junto con la grasa que los rodea cerca de los lomos, así como el lóbulo largo del hígado. Todo esto hay que quitarlo junto con los riñones, y los sacerdotes lo quemarán sobre el altar como una ofrenda especial presentada al Señor. Esta es la ofrenda por la culpa. Cualquier varón de la familia del sacerdote podrá comer la carne. Debe comerla en un lugar sagrado, porque es sumamente santa.

»Las mismas instrucciones se aplican tanto para la ofrenda por la culpa como para la ofrenda por el pecado. Ambas le pertenecen al sacerdote que las usa para purificar a alguien, haciendo así que la persona sea justa ante el Señor.[t] En el caso de la ofrenda quemada, el sacerdote podrá quedarse con la piel del animal sacrificado. Toda ofrenda de grano que haya sido cocida al horno, preparada en una cacerola o en un sartén le pertenece al sacerdote que la presenta. 10 Todas las demás ofrendas de grano, ya sean de harina seca o harina humedecida con aceite de oliva, se repartirán equitativamente entre todos los sacerdotes, los descendientes de Aarón.

Instrucciones adicionales sobre la ofrenda de paz

11 »Estas son las instrucciones con respecto a las distintas clases de ofrendas de paz que se pueden presentar al Señor. 12 Si presentas una ofrenda de paz como una expresión de acción de gracias, el animal de sacrificio acostumbrado debe ser acompañado de varias clases de pan preparados sin levadura: panes planos mezclados con aceite de oliva, obleas untadas con aceite y panes de harina selecta mezclada con aceite de oliva. 13 Esta ofrenda de paz por acción de gracias también debe ser acompañada de panes hechos con levadura. 14 Un pan de cada clase deberá presentarse como ofrenda al Señor. Estos panes pertenecerán al sacerdote que salpica la sangre de la ofrenda de paz contra el altar. 15 La carne de la ofrenda de paz por acción de gracias deberá comerse en el mismo día que se ofrece. No se permite guardar ninguna parte para la mañana siguiente.

16 »Si llevas una ofrenda para cumplir un voto o como una ofrenda voluntaria, la carne deberá comerse en el mismo día que se ofrece el sacrificio, pero lo que quede podrá comerse al día siguiente. 17 Toda la carne que quede hasta el tercer día deberá quemarse por completo. 18 Si al tercer día se come algo de la carne de la ofrenda de paz, la persona que la presentó no será aceptada por el Señor. No recibirás ningún mérito por haberla presentado, pues para entonces, la carne estará contaminada; si la comes, serás castigado por tu pecado.

19 »No se permite comer carne que toque cualquier cosa ceremonialmente impura; deberá quemarse por completo. Se permite comer el resto de la carne, pero solo por los que queden ceremonialmente puros. 20 Si quedas ceremonialmente impuro y comes carne de una ofrenda de paz que se presentó al Señor, serás excluido de la comunidad. 21 Si tocas cualquier cosa que sea impura (ya sea contaminación humana o un animal impuro o cualquier otra cosa impura y detestable) y luego comes carne de una ofrenda de paz presentada al Señor, serás excluido de la comunidad».

Prohibición acerca de la sangre y de la grasa

22 Después, el Señor le dijo a Moisés: 23 «Da las siguientes instrucciones al pueblo de Israel: nunca deberás comer grasa, ya sea de ganado, de oveja o de cabra. 24 Nunca deberás comer la grasa de un animal encontrado muerto o despedazado por animales salvajes, aunque puede usarse para cualquier otro propósito. 25 Cualquiera que coma la grasa de un animal presentado como ofrenda especial al Señor será excluido de la comunidad. 26 Donde sea que vivas, nunca deberás consumir la sangre de ningún ave o animal. 27 Todo el que consuma sangre será excluido de la comunidad».

Porción para los sacerdotes

28 Entonces el Señor le dijo a Moisés: 29 «Da las siguientes instrucciones al pueblo de Israel: cuando presentes una ofrenda de paz al Señor, lleva una parte como ofrenda al Señor. 30 Preséntala al Señor con tus propias manos, como una ofrenda especial para él. Lleva la grasa del animal junto con el pecho, y levanta el pecho como una ofrenda especial al Señor. 31 Luego, el sacerdote quemará la grasa en el altar, pero el pecho le pertenecerá a Aarón y a sus descendientes. 32 El muslo derecho de la ofrenda de paz se le dará al sacerdote como ofrenda. 33 El muslo derecho siempre se le dará al sacerdote que ofrece la sangre y la grasa de la ofrenda de paz. 34 Pues he apartado el pecho de la ofrenda especial y el muslo derecho de la ofrenda sagrada para los sacerdotes. Aarón y sus descendientes tendrán el derecho perpetuo de participar en las ofrendas de paz presentadas por el pueblo de Israel. 35 Esta es la porción que les corresponde. Las ofrendas especiales presentadas al Señor fueron apartadas para Aarón y para sus descendientes desde el momento en que fueron separados para servir al Señor como sacerdotes. 36 En el día que fueron ungidos, el Señor les mandó a los israelitas que dieran estas porciones a los sacerdotes como su parte perpetua de generación en generación».

37 Esas son las instrucciones para la ofrenda quemada, la ofrenda de grano, la ofrenda por el pecado y la ofrenda por la culpa, así como la ofrenda de ordenación y la ofrenda de paz. 38 El Señor le dio esas instrucciones a Moisés en el monte Sinaí cuando les ordenó a los israelitas que presentaran sus ofrendas al Señor en el desierto de Sinaí.

Ordenación de los sacerdotes

Entonces el Señor le dijo a Moisés: «Trae a Aarón y a sus hijos, junto con sus vestiduras sagradas, el aceite de la unción, el becerro para la ofrenda por el pecado, los dos carneros y la cesta con el pan preparado sin levadura, y convoca a toda la comunidad de Israel para que se reúna a la entrada del tabernáculo[u]».

Así que Moisés siguió las instrucciones del Señor, y toda la comunidad se reunió a la entrada del tabernáculo. Moisés les anunció: «¡Esto es lo que el Señor nos ha ordenado que hagamos!». Después presentó a Aarón y a sus hijos y los lavó con agua. A Aarón le puso la túnica oficial y lo ciñó con una faja alrededor de la cintura. Lo vistió con el manto, le puso encima el efod bien asegurado con la faja decorativa. Después Moisés puso el pectoral sobre Aarón y colocó adentro el Urim y el Tumim. Además puso el turbante sobre la cabeza de Aarón y, en la parte delantera del turbante, sujetó la medalla de oro—el símbolo de santidad—tal como el Señor le había ordenado.

10 Después Moisés tomó el aceite de la unción y ungió el tabernáculo y todo lo que había en él, y así los santificó. 11 Roció el altar siete veces con el aceite, de esta manera lo ungió junto con todos los utensilios, al igual que el lavamanos y su base, para santificarlos. 12 Luego derramó un poco de aceite de la unción sobre la cabeza de Aarón, y de esta manera lo ungió y lo santificó para su labor. 13 Después, Moisés presentó a los hijos de Aarón. Los vistió con sus túnicas, las ató con las fajas y les colocó los gorros especiales, tal como el Señor le había ordenado.

14 Luego Moisés presentó el becerro para la ofrenda por el pecado. Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del becerro. 15 Moisés lo mató y tomó parte de la sangre y, con su dedo, la untó sobre los cuatro cuernos del altar para purificarlo. Derramó el resto de la sangre al pie del altar. Mediante este proceso, al purificarlo,[v] el altar quedó consagrado. 16 Después Moisés tomó toda la grasa que rodea las vísceras, el lóbulo largo del hígado, los dos riñones junto con la grasa que los rodea, y lo quemó todo sobre el altar. 17 Luego tomó el resto del becerro—incluidos la piel, la carne y el estiércol—y lo quemó en el fuego fuera del campamento, tal como el Señor le había ordenado.

18 Luego Moisés presentó el carnero para la ofrenda quemada. Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero, 19 y Moisés lo mató. Después tomó la sangre del carnero y la salpicó por todos los lados del altar. 20 Luego cortó el carnero en pedazos, quemó la cabeza, algunos de los pedazos y la grasa en el altar. 21 Después de lavar las vísceras y las patas con agua, Moisés quemó todo el carnero sobre el altar como una ofrenda quemada. Fue un aroma agradable, una ofrenda especial presentada al Señor, tal como el Señor le había ordenado.

22 Después, Moisés presentó el otro carnero, el de la ordenación. Aarón y sus hijos pusieron sus manos sobre la cabeza del carnero, 23 y Moisés lo mató. Después tomó un poco de la sangre y se la untó a Aarón en el lóbulo de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo de su pie derecho. 24 A continuación, Moisés presentó a los hijos de Aarón y les untó un poco de la sangre en el lóbulo de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho. Luego salpicó el resto de la sangre por todos los lados del altar.

25 Acto seguido, Moisés tomó la grasa del carnero, que incluye la grasa de la cola gorda, la que rodea las vísceras, el lóbulo largo del hígado, los dos riñones con la grasa que los rodea, junto con el muslo derecho. 26 Encima de estos puso un pan plano preparado sin levadura, un pan mezclado con aceite de oliva y una oblea untada con aceite de oliva. Estos panes los tomó de la cesta de los panes preparados sin levadura que se había colocado en la presencia del Señor. 27 Entonces, Moisés puso todas estas cosas en las manos de Aarón y sus hijos, y las levantó al Señor como una ofrenda especial. 28 Luego Moisés les quitó de las manos todas estas ofrendas y las quemó sobre el altar, encima de la ofrenda quemada. Esta era la ofrenda de ordenación; era un aroma agradable, una ofrenda especial presentada al Señor. 29 Después Moisés tomó el pecho y lo levantó como una ofrenda especial al Señor. Esta era la porción que le pertenecía a Moisés del carnero de la ordenación, tal como el Señor le había ordenado.

30 A continuación Moisés tomó un poco del aceite de la unción y algo de la sangre que estaba en el altar y los roció sobre Aarón y sus vestiduras y sobre los hijos de Aarón y sus vestiduras. De esta manera, hizo santos a Aarón y a sus hijos junto con sus vestiduras.

31 Después Moisés les dijo a Aarón y a sus hijos: «Hiervan el resto de la carne de las ofrendas a la entrada del tabernáculo, y cómanla ahí mismo, junto con el pan que está en la cesta de las ofrendas para la ordenación, tal como lo ordené cuando dije: “Aarón y sus hijos se lo comerán”. 32 Quemen todo lo sobrante de la carne y del pan. 33 No salgan de la entrada del tabernáculo durante siete días, porque hasta entonces habrá terminado la ceremonia de la ordenación. 34 Todo lo que hemos hecho hoy fue ordenado por el Señor con el fin de purificarlos y hacerlos justos ante él.[w] 35 Ahora permanezcan a la entrada del tabernáculo día y noche durante siete días y hagan todo lo que el Señor exige. Si no lo hacen, morirán, porque esto es lo que el Señor ha ordenado». 36 Entonces Aarón y sus hijos hicieron todo lo que el Señor había ordenado por medio de Moisés.

Los sacerdotes comienzan su labor

Al octavo día, después de la ceremonia de ordenación, Moisés reunió a Aarón, a sus hijos y a los ancianos de Israel. Le dijo a Aarón: «Toma un ternero para una ofrenda por el pecado y un carnero para una ofrenda quemada, ambos sin defecto, y preséntalos al Señor. Luego diles a los israelitas: “Tomen un chivo como ofrenda por el pecado, y también tomen un ternero y un cordero, ambos de un año y sin defecto, para una ofrenda quemada. También tomen un toro[x] y un carnero para una ofrenda de paz, y harina humedecida con aceite de oliva para una ofrenda de grano. Presenten todas estas ofrendas al Señor, porque hoy el Señor se aparecerá a ustedes”».

Así que los israelitas presentaron todas estas cosas a la entrada del tabernáculo,[y] tal como Moisés lo había mandado. Entonces toda la comunidad se acercó y permaneció de pie ante el Señor. Y Moisés dijo: «Esto es lo que el Señor les ha ordenado que hagan para que la gloria del Señor se aparezca ante ustedes».

Luego Moisés le dijo a Aarón: «Acércate al altar y sacrifica tu ofrenda por el pecado y tu ofrenda quemada para purificarte a ti y al pueblo. Luego presenta las ofrendas del pueblo para purificarlos a ellos y hacerlos justos ante el Señor,[z] tal como él lo ha ordenado».

De manera que Aarón fue al altar y mató al ternero como ofrenda por el pecado por sí mismo. Entonces sus hijos le llevaron la sangre, él mojó su dedo en ella y la puso en los cuernos del altar, y después derramó el resto de la sangre al pie del altar. 10 Luego quemó sobre el altar la grasa, los riñones y el lóbulo largo del hígado de la ofrenda por el pecado, tal como el Señor se lo había ordenado a Moisés. 11 Sin embargo, quemó la carne y la piel fuera del campamento.

12 A continuación, Aarón mató al animal para la ofrenda quemada, y sus hijos le llevaron la sangre, y él la salpicó por todos los lados del altar. 13 Luego ellos le entregaron cada uno de los pedazos de la ofrenda quemada, incluida la cabeza, y los quemó en el altar. 14 Después lavó las vísceras y las patas y las quemó en el altar junto con el resto de la ofrenda quemada.

15 Después Aarón presentó las ofrendas del pueblo. Mató al chivo del pueblo y lo presentó como una ofrenda por el pecado, tal como lo había hecho con la ofrenda por su propio pecado. 16 Luego presentó la ofrenda quemada y la sacrificó en la forma establecida. 17 También presentó la ofrenda de grano y quemó un puñado de la mezcla de harina en el altar, además de la ofrenda quemada habitual de la mañana.

18 Después Aarón mató al toro y al carnero como ofrenda de paz del pueblo, y sus hijos le llevaron la sangre, y él la salpicó por todos los lados del altar. 19 Luego tomó la grasa del toro y del carnero—la grasa de la cola gorda y la que rodea las vísceras—junto con los riñones y el lóbulo largo del hígado. 20 Puso estas porciones de grasa encima del pecho de estos animales y las quemó en el altar. 21 Luego Aarón levantó los pechos y los muslos derechos de los animales como una ofrenda especial al Señor, tal como Moisés lo había ordenado.

22 Entonces Aarón levantó las manos hacia el pueblo y lo bendijo. Después de presentar la ofrenda por el pecado, la ofrenda quemada y la ofrenda de paz, se bajó del altar. 23 Luego Moisés y Aarón entraron en el tabernáculo y, cuando salieron, volvieron a bendecir al pueblo, y la gloria del Señor se apareció a toda la comunidad. 24 Un fuego ardiente salió de la presencia del Señor y consumió la ofrenda quemada y la grasa que estaba sobre el altar. Cuando los israelitas lo vieron, gritaron de alegría y se postraron rostro en tierra.

Pecado de Nadab y Abiú

10 Nadab y Abiú, hijos de Aarón, pusieron carbones encendidos en sus incensarios y encima esparcieron incienso. De esta manera, desobedecieron al Señor al quemar ante él un fuego equivocado, diferente al que él había ordenado. Como consecuencia, un fuego ardiente salió de la presencia del Señor y los consumió por completo, y murieron ahí ante el Señor.

Así que Moisés le dijo a Aarón: «Esto quiso decir el Señor cuando dijo:

“Demostraré mi santidad
    por medio de los que se acercan a mí.
Demostraré mi gloria
    ante todo el pueblo”».

Y Aarón guardó silencio.

Después Moisés llamó a Misael y a Elzafán, primos de Aarón e hijos de Uziel—que era tío de Aarón—y les dijo: «Vengan y llévense los cuerpos de sus parientes de delante del santuario a un lugar fuera del campamento». Entonces se acercaron, los agarraron por la ropa y los llevaron fuera del campamento, tal como Moisés lo había mandado.

Luego Moisés les dijo a Aarón y a sus hijos Eleazar e Itamar: «No rasguen su ropa ni dejen de peinarse[aa] en señal de dolor. Si lo hacen, morirán, y el enojo del Señor herirá a toda la comunidad de Israel. Sin embargo, el resto de los israelitas, sus parientes, podrán hacer duelo a causa de la destrucción por fuego de Nadab y Abiú que hizo el Señor. Pero no salgan de la entrada del tabernáculo[ab] o morirán, porque ustedes fueron ungidos con el aceite de unción del Señor». Entonces hicieron lo que Moisés les ordenó.

Instrucciones sobre la conducta de los sacerdotes

Después el Señor le dijo a Aarón: «Tú y tus descendientes nunca deben beber vino ni ninguna otra bebida alcohólica antes de entrar en el tabernáculo. Si lo hacen, morirán. Esta es una ley perpetua para ustedes, que se cumplirá de generación en generación. 10 Deben distinguir entre lo sagrado y lo común, entre lo que es ceremonialmente impuro y lo que es puro. 11 Y deben enseñarles a los israelitas todos los decretos que el Señor les ha dado por medio de Moisés».

12 Luego Moisés les dijo a Aarón y a los hijos que le quedaban, Eleazar e Itamar: «Tomen lo que queda de la ofrenda de grano, después de que se haya presentado una porción como ofrenda especial al Señor, y cómanla junto al altar. Es sumamente santa, por lo tanto, asegúrense de que no contenga levadura. 13 Deberán comerla en un lugar sagrado, porque se les dio a ustedes y a sus descendientes como su porción de las ofrendas especiales que se presentan al Señor. Estos son los mandatos que me fueron dados. 14 Sin embargo, el pecho y el muslo que fueron levantados como ofrenda especial podrán comérselos en cualquier lugar que sea ceremonialmente puro. Estas partes se te han dado a ti y a tus descendientes como su porción de las ofrendas de paz presentadas por el pueblo de Israel. 15 Deberán levantar el muslo y el pecho como ofrenda especial al Señor, junto con la grasa de las ofrendas especiales. Estas partes te pertenecerán a ti y a tus descendientes, tal como el Señor ha ordenado».

16 Luego Moisés les preguntó qué había sucedido con el chivo de la ofrenda por el pecado. Cuando descubrió que había sido quemado, se enojó mucho con Eleazar e Itamar, los hijos que le quedaban a Aarón.

17 —¿Por qué no comieron la ofrenda por el pecado en el lugar sagrado?—les preguntó—. ¡Es una ofrenda santa! El Señor se la dio a ustedes para quitar la culpa de la comunidad y purificar al pueblo, y hacerlo justo ante el Señor.[ac] 18 Puesto que la sangre del animal no fue llevada al Lugar Santo, ustedes debieron haberse comido la carne en el lugar sagrado, como lo ordené.

19 Aarón le contestó a Moisés:

—Hoy, mis hijos presentaron al Señor tanto su ofrenda por el pecado como su ofrenda quemada. No obstante, me ocurrió esta tragedia. ¿Le habría agradado al Señor si yo hubiera comido la ofrenda por el pecado del pueblo en un día tan trágico como este?

20 Cuando Moisés escuchó esto, quedó satisfecho.

Animales ceremonialmente puros e impuros

11 Luego el Señor les dijo a Moisés y a Aarón: «Den las siguientes instrucciones al pueblo de Israel.

»De todos los animales de la tierra, estos son los que puedes usar para alimento: puedes comer cualquier animal rumiante y que tenga las pezuñas totalmente partidas. Sin embargo, no puedes comer los siguientes animales[ad] que tienen las pezuñas partidas o que rumian, pero no ambas cosas. El camello rumia, pero no tiene pezuñas partidas, así que es ceremonialmente impuro para ti. El damán[ae] rumia, pero no tiene pezuñas partidas, por lo tanto, es impuro. La liebre rumia, pero no tiene pezuñas partidas, así que es impura. El cerdo tiene pezuñas partidas de manera pareja, pero no rumia, también es impuro. No puedes comer la carne de estos animales, ni siquiera tocar el cadáver. Son ceremonialmente impuros para ti.

»De todos los animales que viven en el agua, estos son los que puedes usar como alimento: puedes comer cualquier animal del agua que tenga tanto aletas como escamas, sea que procedan de agua salada o de los arroyos. 10 Sin embargo, nunca comas ningún animal del mar o de los ríos que no tenga aletas y escamas. Son detestables para ti. Esto incluye tanto a las criaturas pequeñas que viven en aguas poco profundas como a todas las criaturas que viven en aguas profundas. 11 Siempre serán detestables para ti. Nunca deberás comer su carne, ni siquiera tocar su cadáver. 12 Todo animal del agua que no tenga tanto aletas como escamas es detestable para ti.

13 »Estas son las aves que son detestables para ti y no deberás comerlas: el buitre grifón, el quebrantahuesos, el buitre de cabeza negra, 14 el milano, los halcones de toda clase, 15 los cuervos de toda clase, 16 el búho real, la lechuza campestre, la gaviota, los gavilanes de toda clase, 17 el búho pequeño, el cuervo marino, el búho grande, 18 la lechuza común, la lechuza del desierto, el buitre egipcio, 19 la cigüeña, las garzas de toda clase, la abubilla y el murciélago.

20 »No debes comer insectos alados que caminan por el suelo; son detestables para ti. 21 Sin embargo, puedes comer insectos alados que caminan por el suelo y que tengan articulaciones para poder saltar. 22 Los insectos que se te permite comer incluyen toda clase de langostas, langostones, grillos y saltamontes. 23 Todos los demás insectos alados que caminan sobre el suelo son detestables para ti.

24 »Las siguientes criaturas te harán ceremonialmente impuro: cualquiera que toque el cadáver de uno de esos animales quedará contaminado hasta el anochecer; 25 y si levanta el cadáver, deberá lavar su ropa y quedará contaminado hasta el anochecer.

26 »Todo animal que tenga pezuñas pero que no estén partidas de manera pareja y que no rumie es impuro para ti. Cualquiera que toque el cadáver de dicho animal quedará contaminado. 27 De los animales que caminan en cuatro patas, los que se apoyan sobre sus plantas son impuros. Cualquiera que toque el cadáver de dicho animal quedará contaminado hasta el anochecer. 28 Si alguien levanta el cadáver, deberá lavar su ropa, y permanecerá contaminado hasta el anochecer. Estos animales son impuros para ti.

29 »De los animales pequeños que corren por el suelo, estos serán impuros para ti: la rata-topo, la rata, los lagartos grandes de toda clase, 30 el geco, el varano, el lagarto común, la lagartija de arena y el camaleón. 31 Todos estos animales pequeños son impuros para ti. Cualquiera que toque el cadáver de dichos animales quedará contaminado hasta el anochecer. 32 Si alguno de estos animales muere y cae sobre algo, ese objeto será impuro, ya sea un objeto hecho de madera, de tela, de cuero o de tela áspera. Cualquiera que sea su uso, deberá sumergirse en agua, y quedará contaminado hasta el anochecer. Después de esto, quedará ceremonialmente puro y podrá usarse de nuevo.

33 »Si uno de estos animales cae en una olla de barro, todo lo que haya en la olla quedará contaminado, y habrá que romper la olla. 34 Si el agua de dicho recipiente cae sobre cualquier alimento, este quedará contaminado; y cualquier bebida que haya en el recipiente quedará contaminada. 35 Cualquier objeto sobre el que caiga el cadáver de dichos animales quedará contaminado. Si es un horno o un fogón, deberá ser destruido porque está contaminado, y debes tratarlo como tal.

36 »Sin embargo, si el cadáver de uno de estos animales cae en un manantial o en una cisterna, el agua permanecerá pura pero cualquiera que toque el cadáver quedará contaminado. 37 Si el cadáver cae sobre la semilla que será sembrada en el campo, aun así, la semilla será considerada pura; 38 pero si la semilla está húmeda cuando el cadáver cae sobre ella, la semilla quedará contaminada.

39 »Si un animal que te está permitido comer muere, y alguien toca el cadáver, esa persona quedará contaminada hasta el anochecer. 40 Si come de su carne o se lleva el cadáver, deberá lavar su ropa y permanecerá contaminada hasta el anochecer.

41 »Todos los animales pequeños que corren por el suelo son detestables, y nunca deberás comerlos. 42 Esto incluye todos los animales que se deslizan sobre el vientre, como también los de cuatro patas y los de muchas patas. Todos esos animales que corren por el suelo son detestables, y nunca deberás comerlos. 43 No te contamines a ti mismo al tocarlos. No te hagas ceremonialmente impuro a causa de ellos. 44 Pues yo soy el Señor tu Dios. Debes consagrarte y ser santo, porque yo soy santo. Así que no te contamines al tocar cualquiera de estos animales pequeños que corren por el suelo. 45 Pues yo, el Señor, soy quien te sacó de la tierra de Egipto para ser tu Dios; por lo tanto, sé santo porque yo soy santo.

46 »Estas son las instrucciones con respecto a los animales terrestres, las aves, los seres marinos y los animales que corren por el suelo. 47 Mediante estas instrucciones sabrás lo que es impuro y lo que es puro, y también los animales que puedes comer y los que no puedes comer».

Purificación de la mujer después del parto

12 El Señor le dijo a Moisés: «Da las siguientes instrucciones al pueblo de Israel: si una mujer queda embarazada y da a luz un varón, será ceremonialmente impura por siete días, así como es impura durante su período menstrual. Al octavo día, circunciden el prepucio del niño. Después de esperar treinta y tres días, ella quedará purificada del flujo de sangre del parto. Durante este tiempo de purificación, no debe tocar nada que haya sido consagrado ni tampoco entrar en el santuario hasta que haya terminado su tiempo de purificación. Si una mujer da a luz una hija, quedará ceremonialmente impura durante dos semanas, así como es impura durante su período menstrual. Después de esperar sesenta y seis días, ella quedará purificada del flujo de sangre del parto.

»Cuando se cumpla el tiempo de la purificación, ya sea por haber tenido un hijo o una hija, la mujer deberá llevar un cordero de un año como ofrenda quemada y un pichón de paloma o una tórtola como ofrenda de purificación. Deberá llevar sus ofrendas al sacerdote a la entrada del tabernáculo.[af] Luego el sacerdote las presentará al Señor para purificarla.[ag] Entonces ella volverá a estar ceremonialmente pura después del flujo de sangre del parto. Estas son las instrucciones para una mujer después del nacimiento de un hijo o una hija.

»Si a la mujer no le alcanza para comprar un cordero, deberá llevar un par de tórtolas o dos pichones de paloma. Uno será para la ofrenda quemada y el otro para la ofrenda de purificación. El sacerdote los sacrificará para purificarla a ella, y quedará ceremonialmente pura».

Enfermedades graves de la piel

13 El Señor les dijo a Moisés y a Aarón: «Si alguien tiene una hinchazón, una erupción o una decoloración de la piel que pueda convertirse en una enfermedad grave de la piel,[ah] esa persona debe ser llevada al sacerdote Aarón, o a uno de sus hijos.[ai] El sacerdote examinará la zona afectada de la piel, y si el vello de la zona afectada se ha vuelto blanco y el problema parece estar más profundo que la piel, esta es una enfermedad cutánea grave, y el sacerdote que la examina debe declarar a la persona ceremonialmente impura.

»Sin embargo, si la zona afectada de la piel es solo una decoloración blanca y no parece estar más profunda que la piel, y si el vello en la mancha no se ha vuelto blanco, el sacerdote pondrá a la persona en cuarentena durante siete días. Al séptimo día el sacerdote la volverá a examinar, y si encuentra que la zona afectada no ha cambiado y que el problema no se ha extendido en la piel, el sacerdote la pondrá en cuarentena por siete días más. Una vez cumplidos los siete días, el sacerdote la examinará de nuevo, y si encuentra que la zona afectada ha disminuido y no se ha extendido, el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura; era solamente una erupción. Entonces, la persona lavará su ropa y quedará ceremonialmente pura; pero si la erupción continúa extendiéndose después de que la persona fue examinada por el sacerdote y declarada pura, la persona infectada deberá regresar para ser examinada nuevamente. Si el sacerdote encuentra que la erupción se ha extendido, debe declarar a la persona ceremonialmente impura, porque ciertamente es una enfermedad de la piel.

»Cualquiera que contrae una enfermedad grave de la piel deberá acudir al sacerdote para ser examinado. 10 Si el sacerdote encuentra una hinchazón blanca en la piel, y el vello en la mancha se ha vuelto blanco y hay una llaga abierta en la zona afectada, 11 es una enfermedad crónica de la piel y el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura. En tales casos, no es necesario poner a la persona en cuarentena porque es evidente que la piel está contaminada por la enfermedad.

12 »Ahora bien, supongamos que la enfermedad se ha extendido por toda la piel de la persona y cubre todo su cuerpo de pies a cabeza. 13 Cuando el sacerdote examine a la persona infectada y encuentre que la enfermedad cubre todo su cuerpo, la declarará ceremonialmente pura. Dado que la piel se ha vuelto completamente blanca, la persona es pura. 14 Pero si aparecen llagas abiertas, la persona infectada será declarada ceremonialmente impura. 15 El sacerdote deberá hacer esta declaración tan pronto como vea una llaga abierta, ya que las llagas abiertas indican la presencia de una enfermedad de la piel. 16 Sin embargo, si las llagas abiertas sanan y se vuelven blancas como el resto de la piel, la persona deberá regresar al sacerdote 17 para ser examinada de nuevo. Si las zonas afectadas efectivamente se han vuelto blancas, el sacerdote declarará ceremonialmente pura a la persona al decir: “¡Eres pura!”.

18 »Si alguien tiene una llaga purulenta en la piel que ha empezado a sanar, 19 pero en el mismo sitio aparece una hinchazón blanca o una mancha blanca rojiza, la persona deberá acudir al sacerdote para que la examine. 20 Si el sacerdote, al examinarla, ve que el problema está más profundo que la piel y si el vello en el área afectada se ha vuelto blanco, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura; la llaga purulenta se ha convertido en una enfermedad grave de la piel. 21 Sin embargo, si el sacerdote no encuentra vello blanco en la zona afectada y ve que el problema no parece estar más profundo que la piel y ha ido disminuyendo, el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena por siete días. 22 Si durante ese tiempo el mal del área afectada se extiende por la piel, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura, porque es una enfermedad grave; 23 pero si la zona afectada no crece ni se extiende, es simplemente la cicatriz de la llaga, y el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura.

24 »Si alguien sufre una quemadura en la piel y la zona quemada cambia de color, poniéndose blanca rojiza o blanca brillante, 25 el sacerdote deberá examinarla. Si encuentra que el vello en la zona afectada se ha vuelto blanco y que el problema parece estar más profundo que la piel, entonces ha surgido en la quemadura una enfermedad de la piel. El sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura, porque sin duda se trata de una enfermedad grave de la piel. 26 Sin embargo, si el sacerdote no encuentra vello blanco en la zona afectada y ve que el problema no parece estar más profundo que la piel y ha disminuido, el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena por siete días. 27 Al séptimo día, el sacerdote deberá examinarla de nuevo. Si la zona afectada se ha extendido en la piel, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura, porque es sin duda una enfermedad grave de la piel; 28 pero si la zona afectada no ha cambiado ni se ha extendido por la piel, sino que ha disminuido, es simplemente una hinchazón causada por la quemadura. Luego el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura, porque es simplemente la cicatriz de la quemadura.

29 »Si alguien, sea hombre o mujer, tiene una llaga en la cabeza o en la barbilla, 30 el sacerdote deberá examinar la llaga. Si encuentra que está más profunda que la piel y contiene vello delgado y amarillo, el sacerdote deberá declarar a la persona ceremonialmente impura. Se trata de una llaga costrosa en la cabeza o en la barbilla. 31 Si el sacerdote, al examinar la llaga costrosa, encuentra que no está más profunda que la piel, pero no tiene vello negro, deberá poner a la persona en cuarentena por siete días. 32 Cumplidos los siete días, el sacerdote deberá examinar la llaga de nuevo. Si encuentra que la llaga costrosa no se ha extendido y que no contiene vello amarillo y que no parece estar más profunda que la piel, 33 la persona deberá afeitarse totalmente, con excepción de la zona afectada. Luego el sacerdote deberá poner a la persona en cuarentena durante otros siete días. 34 Al séptimo día examinará la llaga de nuevo. Si no se ha extendido y no parece estar más profunda que la piel, el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura. Entonces la persona lavará su ropa y quedará ceremonialmente pura. 35 Sin embargo, si la llaga costrosa empieza a extenderse después de haber sido declarada pura, 36 el sacerdote deberá examinarla de nuevo. Si encuentra que la llaga se ha extendido, no hace falta que el sacerdote busque el vello amarillo; la persona infectada quedará ceremonialmente impura. 37 Pero si el color de la llaga costrosa no ha cambiado y ha crecido el vello negro, la llaga se ha curado. Entonces el sacerdote declarará a la persona ceremonialmente pura.

38 »Si alguien, sea hombre o mujer, tiene manchas blancas brillantes en la piel, 39 el sacerdote deberá examinar la zona afectada. Si descubre que las manchas brillantes son de un tono blanco opaco, no es nada más que una erupción de la piel, y la persona quedará ceremonialmente pura.

40 »Si a un hombre se le cae el cabello y queda calvo, sigue ceremonialmente puro. 41 Si pierde el cabello de la frente, y simplemente quedó calvo de la frente; sigue siendo puro. 42 Sin embargo, si aparece una llaga de color blanco rojizo en la zona calva de la cabeza o en la frente, es una enfermedad de la piel. 43 El sacerdote deberá examinarlo, y si descubre hinchazón alrededor de la llaga blanca rojiza, en cualquier parte de la cabeza del hombre, y tiene la apariencia de una enfermedad de la piel, 44 el hombre ciertamente está infectado con una enfermedad de la piel y es impuro. Entonces el sacerdote deberá declararlo ceremonialmente impuro debido a la llaga de la cabeza.

45 »Los que sufran de una enfermedad grave de la piel deberán rasgar su ropa y dejar su cabello sin peinar.[aj] Tienen que cubrirse la boca y gritar: “¡Impuro! ¡Impuro!”. 46 Permanecerán ceremonialmente impuros todo el tiempo que les dure esa enfermedad grave, y deberán vivir aislados en un lugar fuera del campamento.

Tratamiento de ropa contaminada

47 »Ahora, supongamos que el moho[ak] contamina alguna prenda de vestir de lana o de lino, 48 alguna tela de lana o de lino, la piel de un animal o cualquier objeto hecho de cuero. 49 Si la zona afectada de la ropa, de la piel del animal, de la tela o del artículo de cuero se ha vuelto verdosa o rojiza, está contaminada de moho y tendrá que ser mostrada al sacerdote. 50 Después de haber examinado la parte afectada, el sacerdote pondrá el artículo en cuarentena por siete días. 51 Al séptimo día el sacerdote lo examinará de nuevo. Si la zona afectada se ha extendido, la ropa o la tela o el cuero sin ninguna duda está contaminado de un moho grave y queda ceremonialmente impuro. 52 El sacerdote deberá quemar el objeto—la prenda de vestir, la tela de lana o de lino o el artículo de cuero—pues ha sido contaminado con un moho grave. Tendrá que ser totalmente destruido por fuego.

53 »Si, al examinarlo de nuevo, el sacerdote descubre que la zona contaminada no se ha extendido en la prenda de vestir, en la tela o en el cuero, 54 ordenará que se lave el objeto y luego lo pondrá en cuarentena durante otros siete días. 55 Entonces el sacerdote lo examinará otra vez. Si ve que la zona afectada no ha cambiado de color después de haber sido lavado, aunque no se haya extendido, el objeto está contaminado. Tendrá que quemarlo por completo, sin importar si la mancha[al] está por dentro o por fuera. 56 Sin embargo, si el sacerdote lo examina después de haber sido lavado y ve que la zona afectada se ha desteñido, entonces cortará esa parte de la prenda de vestir, de la tela o del cuero. 57 Si la mancha reaparece en la prenda de vestir, en la tela o en el artículo de cuero, es evidente que el moho está extendiéndose, y el objeto contaminado tendrá que ser quemado; 58 pero si la mancha desaparece de la ropa, de la tela o del artículo de cuero después de haber sido lavado, este se debe lavar nuevamente; y entonces quedará ceremonialmente puro.

59 »Estas son las instrucciones acerca de cómo tratar con el moho que contamina una prenda de vestir de lana o de lino, o tela o cualquier objeto hecho de cuero. Esta es la manera en que el sacerdote determinará si estos artículos son ceremonialmente puros o impuros».

Purificación de las enfermedades de la piel

14 El Señor le dijo a Moisés: «Las siguientes instrucciones son para los que buscan la purificación ceremonial de una enfermedad cutánea:[am] los que han sido sanados deben ser llevados al sacerdote, quien los examinará en un lugar fuera del campamento. Si el sacerdote comprueba que alguien se ha sanado de una enfermedad grave de la piel, llevará a cabo una ceremonia de purificación, usando para ello dos aves vivas que estén ceremonialmente puras, un palo de cedro,[an] un hilo escarlata y una rama de hisopo. El sacerdote mandará matar una de las aves sobre una vasija de barro llena de agua fresca. Tomará el ave viva, el palo de cedro, el hilo escarlata y la rama de hisopo, y los mojará en la sangre del ave muerta sobre el agua fresca. Luego el sacerdote rociará la sangre del ave muerta siete veces sobre la persona que está siendo purificada de la enfermedad cutánea. Después de purificar a la persona, el sacerdote soltará el ave viva en el campo abierto.

»Entonces, aquellos que están siendo purificados deberán lavar su ropa, rasurarse todo el cuerpo y bañarse con agua; así quedarán ceremonialmente puros y podrán regresar al campamento. Sin embargo, tendrán que permanecer fuera de su carpa durante siete días. Al séptimo día, nuevamente deberán rasurarse todo el pelo de su cabeza, incluidas la barba y las cejas. También deberán lavar su ropa y bañarse con agua; entonces quedarán ceremonialmente puros.

10 »Al octavo día, cada persona que está siendo purificada debe llevar dos corderos sin defecto y una cordera de un año sin defecto, junto con una ofrenda de grano de seis litros[ao] de harina selecta humedecida con aceite de oliva, y un tercio de litro[ap] de aceite de oliva. 11 Después el sacerdote oficiante presentará a la persona que será purificada, junto con las ofrendas, ante el Señor a la entrada del tabernáculo.[aq] 12 El sacerdote tomará uno de los corderos y el aceite de oliva y los ofrecerá como una ofrenda por la culpa y los levantará como una ofrenda especial ante el Señor. 13 Luego matará al cordero en el área sagrada donde se matan las ofrendas por el pecado y las ofrendas quemadas. Al igual que la ofrenda por el pecado, la ofrenda por la culpa le pertenece al sacerdote; es una ofrenda sumamente santa. 14 Luego el sacerdote tomará un poco de la sangre de la ofrenda por la culpa y la untará en el lóbulo de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho de la persona que está siendo purificada.

15 »Después el sacerdote derramará un poco del aceite de oliva en la palma de su propia mano izquierda. 16 Mojará el dedo derecho en el aceite que tiene en la palma y rociará un poco del aceite siete veces ante el Señor. 17 A continuación untará un poco del aceite que está en la palma sobre la sangre de la ofrenda por la culpa que está en el lóbulo de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho de la persona que está siendo purificada. 18 El sacerdote untará el resto del aceite que le quede en la mano sobre la cabeza del que está siendo purificado. Mediante este proceso el sacerdote purificará a[ar] la persona ante el Señor.

19 »Luego el sacerdote deberá presentar la ofrenda por el pecado para purificar a la persona que fue sanada de la enfermedad de la piel. Después, el sacerdote matará al animal que se usará para la ofrenda quemada 20 y la presentará sobre el altar junto con la ofrenda de grano. Mediante este proceso, el sacerdote purificará al que fue sanado y quedará ceremonialmente puro.

21 »Aquel que sea demasiado pobre y no tenga para comprar estas ofrendas podrá llevar un cordero para la ofrenda por la culpa, para que se levante como una ofrenda especial para purificación. También deberá llevar dos litros[as] de harina selecta humedecida con aceite de oliva para la ofrenda de grano y una taza de aceite de oliva. 22 La ofrenda también debe incluir dos tórtolas o dos pichones de paloma, según sus posibilidades. Una de ellas deberá ser usada para la ofrenda por el pecado y la otra para la ofrenda quemada. 23 Al octavo día de la ceremonia de la purificación, la persona que está siendo purificada debe llevar las ofrendas al sacerdote en la presencia del Señor a la entrada del tabernáculo. 24 Entonces el sacerdote tomará el cordero para la ofrenda por la culpa, junto con el aceite de oliva, y los levantará como una ofrenda especial para el Señor. 25 Después matará al cordero para la ofrenda por la culpa. Tomará un poco de la sangre y la untará en el lóbulo de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho de la persona que se purifica.

26 »El sacerdote también derramará un poco del aceite de oliva en la palma de su propia mano izquierda. 27 Mojará el dedo derecho en el aceite de la palma y lo rociará siete veces ante el Señor. 28 A continuación untará un poco del aceite que está en la palma de la mano sobre la sangre de la ofrenda por la culpa que está en el lóbulo de la oreja derecha, en el pulgar de la mano derecha y en el dedo gordo del pie derecho de la persona que está siendo purificada. 29 El sacerdote untará el resto del aceite que le quede en la mano sobre la cabeza del que está siendo purificado. Mediante este proceso, el sacerdote purificará a la persona ante el Señor.

30 »Después el sacerdote ofrecerá las dos tórtolas o los dos pichones de paloma, según lo que la persona pueda pagar. 31 Una de las aves es una ofrenda por el pecado y la otra, una ofrenda quemada; serán presentadas junto con la ofrenda de grano. Mediante este proceso, el sacerdote purificará a la persona ante el Señor. 32 Estas son las instrucciones para la purificación de los que se han recuperado de una enfermedad grave de la piel, pero no les alcanza para llevar las ofrendas que se requieren normalmente para la ceremonia de purificación».

Nueva Traducción Viviente (NTV)

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